Una mente prodigiosa de 16 años

Desde que era muy pequeño, esta joven promesa mostró un gran interés por esta materia, y ahora, con varios premios de olimpiadas matemáticas en su haber, esa fascinación ha crecido de forma exponencial. El punto de inflexión, fue cuando en sexto de primaria fue seleccionado para participar en el proyecto ESTALMAT de estímulo del talento matemático. A partir de entonces, los números se convirtieron en su lenguaje natural y los problemas, en su mayor desafío. Hace dos años ya compitió en la fase nacional de la olimpiada de 2º de ESO, quedando en un muy buen puesto. «Las matemáticas son mi vocación y mi única afición. Todo mi tiempo libre se lo dedico a ellas. Me encanta aplicar la lógica y el ingenio para resolver problemas, sobre todo, si son difíciles porque encontrar la solución es mucho más satisfactorio. También estudio matemática teórica, que me aporta otra manera de ver el mundo, mucho más abstracta», comenta.

Detrás de este joven prodigio hay un hombre que ha sido su guía y mentor: Francisco Bellot Rosado, Paco. Este entregado catedrático de Matemáticas jubilado y miembro de la comisión de olimpiadas de la Real Sociedad Matemática Española ha jugado un papel fundamental en esa pasión tan desbordante de Fernando. Desde que le conoció, Paco percibió el excepcional potencial de este joven y se propuso y desafiarlo constantemente. «Fernando es muy brillante y lo más impresionante de todo, es su dedicación y su capacidad para enfrentar cualquier problema. Siempre está dispuesto a aprender y a superarse a sí mismo«, explica Bellot, quien es, además, representante para Europa de la World Federation of National Mathematics Competitions y profesor en los seminarios preparatorias de los chavales que acuden a las olimpiadas.

«Los martes y miércoles impartimos una clase de resolución de problemas en el Aulario de la UVa. Acuden unos 20 estudiantes en total, dese 3º de ESO hasta 2º de Bachillerato. Fernando es uno de ellos y como alumno es excelente. Hay que destacar que ha sido invitado a participar en el Barcelona Math Contest. Para estos jóvenes, la competición resulta muy beneficiosa ya que aprenden a esforzarse hasta el final y a no dar ningún problema por perdido hasta el último segundo», indica el veterano profesor de 82 años. «Para mí, estas clases de resolución de problemas que doy cada semana a chavales que como Fernando, son unos apasionados de las matemáticas, son las más gratificantes de mi vida. Les seguiré dando clase mientras el cuerpo aguante», añade.

Si en marzo, en la Olimpiada nacional, a Fernando le salen bien las cuentas, tendrá también la opción de acudir representando a España a la Olimpiada Internacional de Matemáticas en Bath (Reino Unido), en julio 2024, así como a la Olimpiada Iberoamericana Organizada de forma conjunta por España y Portugal el próximo septiembre. «En España hay jóvenes muy bien preparados veo complicado ganar, sobre todo por la edad, pero creo que tengo oportunidades, al menos de conseguir una medalla», expone este joven, que tiene las miras puestas en la doble titulación de Ingeniería Informática y Matemáticas. Su sueño es poder aplicar las matemáticas a solucionar problemas de la vida real mediante la tecnología.