Valladolid

El menor al que le cayó una baldosa de una fachada sigue ingresado: «Tiene partes del pie aplastadas»

Todo sucedió poco antes de las 21:00 horas, cuando Miguel volvía a casa junto a un amigo después de pasar una tarde de compras. Una baldosa que revestía la parte alta de la fachada de la tienda Punto Roma de la calle Santiago se desprendió desde su ubicación -a unos tres metros del suelo- y cayó sobre la cabeza y el pie del adolescente. El tremendo impacto le causó una brecha en la cabeza a este joven estudiante de cuarto de la ESO en el Colegio La Enseñanza, pero la peor parte se la llevó su pie, que resultó afectado tanto a nivel óseo como vascular, tal y como explica su madre.

«En la cabeza le dieron dos o tres puntos y eso fue lo de menos. Le hicieron luego un escáner y le dio que estaba todo bien», explica Teresa, quien indica que el impacto en la cabeza generó otros daños a su hijo. «Al golpearle la baldosa le partió los dientes. Tiene chascado uno de los 'paletos' con uno de los dientes de abajo y todo esto después de haber pasado dos años con los bráquets», lamenta.

Familiares y amigos se han volcado con Miguel desde la misma noche del suceso, tal y como explica su tío, Jesús Sánchez, quien señala que, aunque ahora lo más importante es la recuperación de su sobrino, no quieren que este percance haga mella en su formación. «Va a estar mucho tiempo sin ir a clase y le están llevando tareas para que no pierda el curso», indica.

Este no es el único accidente de similares características que se ha producido en este punto. En el verano de 2022 una mujer también resultó herida después de que se le cayeran encima unas losetas que se desprendieron de la misma fachada y este hecho indigna especialmente a la familia. «Estamos llevando fatal que haya pasado otra vez y que no se haya hecho nada», asegura la madre de Miguel, que ha contactado con un abogado para que lleve este caso. «Alguien ha metido la pata porque si ha pasado otra vez, tenían que haber hecho algo para que no volviera a ocurrir. Se podían haber atornillado las baldosas y esto no habría pasado», sentencia Teresa Sánchez.

La semana pasada se retiraron todas las baldosas de la fachada afectada, tanto las de Punto Roma como las de la Farmacia colindante. Después de que se quitasen todas las losetas, los dos establecimientos han retomado su actividad comercial. Este periódico se ha puesto en contacto con los dos negocios, pero sus responsables han declinado ofrecer su testimonio sobre lo ocurrido.

Miguel Camino es un joven muy deportista. Hasta hace un par de años practicaba baloncesto y ahora había convertido el gimnasio en su segunda casa, una actividad física que tendrá que parar por prescripción médica, según desvela su madre. «Las noticias que nos han dado no han sido muy buenas. Le han dicho que el día de mañana le van a quedar secuelas, que no va a poder saltar ni practicar baloncesto y que puede tener una artrosis prematura», revela Teresa, quien, junto a su familia, está tratando de que los problemas físicos no acaben en el terreno psicológico para el joven. «En casa le estamos mentalizando de que con el paso del tiempo puede haber otros medios y que no tiene que ser todo tan negro», añade.

Según indica su tío, si todo va bien a Miguel le quedan otras dos semanas en el hospital. En ese tiempo este adolescente recibirá, a buen seguro, la visita de amigos y compañeros del Colegio La Enseñanza, que se han volcado con él desde que se conoció lo sucedido el pasado día 1 de abril, cuando lo que había sido una tarde de compras acabó en el Clínico, donde este joven, que cumplió 16 años en febrero, volverá a pasar por quirófano esta semana.