Medina estrena la alta velocidad con 30.657 viajeros durante el primer año

Desde que se pusiera en marcha de manera oficial la estación de Alta Velocidad de la localidad vallisoletana el 18 de diciembre de 2017 y hasta pasado jueves, un total de 15.710 viajeros de toda la provincia decidieron apostar por el tren como medio de transporte. De esta cifra global, un total de 15.710 fueron los usuarios que subieron en la estación medinense y 14.947 los que descendieron de los tres de alta velocidad en la villa de las ferias.

Con estos datos –facilitados por Renfe– se podría decir que la estación medinense poco a poco va ganando adeptos. Tal es así que durante los últimos ocho meses el número de usuarios habría ascendido en más de 22.500. (Según los datos facilitados en el mes de abril, la estación habría contado con un total de 8.066 viajeros).

A pesar de que los trenes a Galicia suelen contar con un elevado número de viajeros, sobre todo durante los festivos y el verano, el principal destino es Madrid. Según los datos facilitados, la cifra de viajeros entre la capital de España y el municipio vallisoletano se ha incrementado un 167%, pasando de 8.937 en 2017 a los 23.846 de 2018.

Los usuarios que viajan en trenes de la alta velocidad a Madrid por cuestiones ociosas destacan que «las combinaciones son buenas porque que puedes ir y venir en el día y si entras en internet hay promociones con precios muy asequibles, tanto que sale más barato ir en alta velocidad que en un regional convencional».

El primero de los trenes que salen desde Medina del Campo con destino a Madrid es a las 7:37 horas de la mañana. Desde ese momento los viajeros contarán con un total de cuatro frecuencias más (12:08, 16:14; 16:59 y 21:44 horas).

Sin embargo, para algunos de los usuarios frecuentes de la alta velocidad, las frecuencias serían escasas ya que «hay trenes que hacen parada técnica en Medina y no comercial, por lo que sería una buena opción que esos trenes tuvieran una parada comercial para así poder compensar la falta de frecuencias en las horas principales del día». Hasta abril de este año, el 86,7% de los pasajeros, es decir 4.975, decidieron utilizar los Alvia Madrid-Salamanca y un 38,3%, es decir 3.091 clientes, decidieron pasar unos días en la comunidad gallega. A pesar de no facilitar los porcentajes de los últimos ocho meses, la tendencia, según comentan desde la estación, es la misma.

En esta estación tienen parada cinco servicios sentido Medina-Madrid y seis servicios sentido Madrid-Medina; en total tienen parada once servicios: tres Alvia de Galicia-Madrid; tres Alvia de Madrid-Galicia; dos Alvia de Madrid-Salamanca; un Alvia de Salamanca-Madrid; un Intercity Zamora-Madrid y un Intercity Madrid-Zamora.

Como viene siendo habitual desde que se pusiera en marcha, los usuarios, además de solicitar más frecuencias en horarios principales, también reclamana un servicio de autobuses lanzadera que conecte la estación tradicional con la de alta velocidad.

También se siguen quejando de que la máquina expendedora de billetes –la estación no cuenta con una taquilla tradicional– solo acepta tarjetas de crédito y débito, y el último de los reclamos es la instalación en el recinto de una máquina expendedora de bebidas y alimentos, ya que el local comercial sigue cerrado.

La estación de alta velocidad medinense es una infraestructura ajustada a los nuevos tiempos en los que el control del gasto marcaron el ritmo del proyectos. Este servicio contó con una inversión total de 3,6 millones de euros (IVA incluido) y el edificio, ubicado en las proximidades de la antigua fábrica de la cerámica de San Pedro, cuenta con una superficie total de 551 metros cuadrados, en los que se han planeado un total de 100 plazas de aparcamiento, de las cuales cinco están reservadas para personas con movilidad reducida.

El edificio principal tiene una superficie de 350 metros cuadrados en los que se han diseñado todos los servicios propios de una estación como son una sala de espera amplia, la zona de control de equipaje y varias áreas destinadas a despachos y oficinas. La estación, de una única planta, también cuenta con una zona comercial que permanece cerrada y una pasarela elevada para peatones construida a base de un armazón metálico y unas cristaleras que sirve para conectar los dos andenes con la terminal. Esta fue una de las primeras estaciones de alta velocidad inauguradas que no cuentan con personal de servicio a disposición de los usuarios de la estación.