Valladolid

Limpiadoras de portales de La Rondilla van a la huelga porque no cobran

Estas trabajadoras han colgado la escoba y la fregona al ver que sus salarios seguían retrasándose sin una explicación convincente. Durante los meses de verano, hicieron una huelga intermitente que afectaba a una semana de cada mes. El paro se hizo notar en las más de 60 comunidades de vecinos afectadas. 18 de ellas ya han sustituido a la empresa Soldelim subrogando a sus trabajadoras. «Otras comunidades, en cambio, siguen pagando a la empresa, pero la empresa no nos paga a nosotras», explica Susana Arnanz, que lleva 25 años en la empresa. «Lo más curioso de todo es que en junio, cuando los responsables de Soldelim, después de pasar olímpicamente de nosotras, al escucharnos hablar de huelga indefinida, se comprometieron a regularizar nuestra situación si acabábamos con la huelga. Nosotras cumplimos, pero ellos no. Por eso, retomamos el paro», añade.

Con el apoyo del sindicato CNT, las trabajadoras arrancaron ayer la huelga con un piquete informativo frente a la sede de la empresa, que estaba cerrada a cal y canto. Acto seguido recorrieron algunas de las comunidades de vecinos en las que trabajan para informar de su situación. «Estamos tan decididas de ir a la huelga como hartas de no cobrar. Lo que buscamos es una solución justa a este conflicto. En nuestra profesión hay un gran aislamiento debido a las condiciones particulares de nuestro trabajo. Eso provoca que ni siquiera conozcamos a algunas compañeras que trabajan en otras zonas de la ciudad. Puede que haya alguna limpiadora más afectada y no lo sepamos. Nuestros jefes están desaparecidos. No hay manera de contactar con ellos», añade Susana Arnanz y efectivamente, este diario ha intentado ponerse en contacto con la gerencia de Soldelim sin éxito alguno.

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A estas trabajadoras les falta por percibir las nóminas de mayo a octubre (seis en total), además de las pagas extras de Navidad de 2022 y la de verano de este año. «La situación es insostenible. Yo tengo 20 años de antigüedad. Antes estaba en otra empresa y hace 13 me subrogaron en Soldelim. Yo sólo limpio en una comunidad y tengo un contrato por 9 horas. Ahora mismo estoy de baja desde hace 2 meses. Mi comunidad sigue pagando a la empresa, pero esta no ha enviado a nadie a sustituirme. Nadie está limpiando mi portal y a mí, tampoco me pagan la baja. No sé si cuando reciba el alta, tendré trabajo. Lo tengo todo denunciado porque tengo que defender lo que es mío, pero esta situación está afectando gravemente a la salud», explica Pilar Muñoz, quien dice que están viviendo gracias a la pensión de jubilación de su marido.

Para muchas de estas trabajadoras, la situación empieza a ser insostenible. «Yo llevo 24 años en la empresa y limpio 9 portales. Mi marido no tiene trabajo y estamos sobreviviendo gracias a una ayuda. No podemos aguantar mucho más», añade Angélica Sanz. «Yo he tenido que pedir dinero a mi hijo. Soy viuda y no cobro pensión. No llego a fin de mes. Hace 15 días me dio un ataque de ansiedad. Gracias a que tengo el apoyo de mi familia. Si no, no sé qué sería de mí», dice Ana Isabel Prieto, otra de las afectadas.

Las reivindicaciones de la plantilla para levantar esta huelga pasan por el pago íntegro de todas las nóminas y extras adeudadas. «La empresa no tiene intención de cerrar, pero hasta ahora ha decidido ahorrar en salarios para pagar otros gastos que desconocemos. No pensamos parar hasta conseguir lo que es nuestro», concluyen estas profesionales de la limpieza.