De un segundo plano discreto a política multitarea en un suspiro. Gema Gómez (Segovia, 1985), ocupa la Vicepresidencia de la Diputación, la portavocía de Ciudadanos, es edil en el Ayuntamiento y secretaria de Organización del partido en Valladolid. En pleno proceso interno de Ciudadanos, donde ... milita desde cinco años, se alinea con los de Arrimadas y se bate con la primera crisis de alcaldes y concejales disconformes con su gestión.
–Por empezar por lo último. ¿Cómo está el ambiente después de que se aireara que algunos de sus alcaldes pidieron su dimisión?
–Hicimos una reunión interna para ver cómo quedaba la reestructuración de Diputación. En ruegos y preguntas, el otro día, dos alcaldes concretos querían entregarme un documento para el que no tenían el consenso de los que estaban allí. En una segunda reunión, de nuevo un único concejal, de la treintena de cargos públicos que había, quiso presentar un documento similar, anónimo, que no estaba firmado por nadie. No era el foro y no procedía el lugar ni la forma. Hay dos alcaldes y un concejal que discrepan un poco con nuestra línea de acción, pero es curioso que sean tres personas de casi noventa cargos públicos y sean coincidentes con las personas que no nos avalaban cuando nos presentamos como candidatas a diputadas. De hecho entonces quisieron presentar una candidatura alternativa y no pudieron hacerlo.Contábamos con el respaldo del 73% de los cargos públicos, perdieron esa votación y son los mismos los que protestan en esta situación.
–Achacaba usted esta petición de dimisión al proceso interno del partido. ¿No se está dando una imagen de gran división interna?
–No lo calificaría como crisis, sino como un proceso previo a una asamblea. Inés Arrimadas ha presentado su candidatura con su proyecto y entiendo que haya personas que difieran y que tengan otra idea de partido. Pero eso no debería mezclarse con el tema de la Diputación.
–Hablaba de que podía expedientarse a estos cargos y coincide con que Francisco Igea pedía hace poco que sea posible discrepar dentro del partido. Porque los estatutos marcan que una discrepancia pública es motivo de expediente.
–No se abre un expediente de manera aleatoria. Conforme a la reglamentación propia que tenemos, estatutos y reglamento de organización, están tipificadas como infracciones muy graves, graves o leves según qué actuaciones. Si algún afiliado cree que con determinadas acciones se incurre en alguna de esas infracciones, lo puede llevar al comité de régimen disciplinario y garantías y son ellos los que deciden si se abre expediente o no.
–Su imagen aparece unida al llamado aparato del partido.
–Me afilié a Ciudadanos pensando en una idea de partido y la comparto, por eso estoy aquí. Me alegra que el partido haya confiado en mí para determinadas secretarías o que me hayan puesto como portavoz. Por eso voy a estar siempre a disposición de un partido en el que creo.
–Así que sí.
–Bueno, Paco Igea también ostentaba una Secretaría conforme al reglamento establecido en su momento.
–¿Cree positivo que se presente contra Arrimadas o vería mejor una sola candidatura?
–Esa es una decisión que debe tomar de manera personal. Lo que veo es que si tiene una idea de partido diferente sería coherente con la idea que defiende presentar una candidatura para hacerla valer.
–¿Cree que contaría con respaldo?
–No lo sé. Mi líder indiscutible, desde luego, es Inés Arrimadas, y mi voto es para Inés Arrimadas.
–¿Le parece adecuado ese modelo de baronías que pedía Igea, con líderes territoriales fuertes, o prefiere un líder nacional sólido?
–Ciudadanos es uno de los partidos que defiende la misma idea en todos los territorios y es lo coherente y necesario, porque poco tiene que ver el PSOE de Extremadura con el PSC. Creo que la idea de unidad, de partido, es si cabe más necesaria que nunca.
–Pero si el líder se equivoca, caso de Rivera, se acusa globalmente.
–Pero hay una estrategia de partido, un comité ejecutivo, no es un líder unipersonal. Hay un líder con un equipo alrededor, comité ejecutivo, consejo general y demás.
–En Twitter, donde se hace política ahora, Igea hablaba a raíz de un acuerdo con el PSOE en Burgos de que ese es el centro que busca, capaz de pactar a un lado y a otro.
–Nosotros somos un partido de centro y pactamos a izquierda y a derecha. De hecho, ahroa mismo la línea que Arrimadas plantea en algunos territorios es esa, unir al constitucionalismo, pactar tanto con el PP como con el PSOE. No nos hemos apartado de esa vía.
–En un momento dado Ciudadanos sí eligió como socio prioritario al PP. Así lo dictaminó en su momento Albert Rivera. De hecho en Castilla y León no hubo lugar a otro pacto.
–No me corresponde a mí valorar, pero lo que se ve es que no se quería pactar con Sánchez. No se dijo un 'no al PSOE' o a partidos constitucionalistas, sino a Sánchez por lo que estaba permitiendo en Barcelona, por ejemplo, pactando en la Diputación con los independentistas.
–Aquí en la Diputación esos alcaldes de Cs disconformes llegaron a anunciar que pedirían amparo al presidente, Conrado Íscar (PP). ¿Cómo se asimila eso desde la Vicepresidencia de la institución?
–Algunos de esos alcaldes me conocen y llevan trabajando en el partido como yo, más de cinco años. Era el titular que querían marcar, porque mi teléfono lo tienen abierto y la oficina está a su disposición. Que se hable con el presidente de la Diputación me parece bien, igual que yo estoy dispuesta a escuchar y recibir a cualquier alcalde independientemente de su color político.
–¿Cómo van las relaciones con Conrado Íscar después del lío de los presupuestos participativos?
–Me gustaría explicarlo bien, porque los presupuestos participativos tenían que ejecutarse conforme a un calendario y debería haberse iniciado en el mes de abril. Si en abril no se ejecuta, ya no lo puedes poner en marcha en agosto ni en octubre ni en noviembre. El PP, de facto, quitó los presupuestos participativos en el mes de abril. Cuando nos sentamos a negociar con el PP quisimos recuperar los presupuestos participativos. De hecho, en el presupuesto hay una partida de 600.000 euros, pero no era para poner en marcha unos presupuestos participativos que debían haberse puesto en marcha en el mes de abril. Eran unos recursos destinados a cubrir partidas que habían resultado insuficientes del proceso anterior o aquellas que, aun siendo votadas, se habían quedado sin financiación. ¿Que ahora se cambia de idea y queremos que vayan para empleo? Fenomenal. Pero hay que explicar bien cuál es el proceso. Ayer se reunió la mesa para hacer un seguimiento de las propuestas votadas el pasado año y ver las deficiencias que se habían detectado para intentar mejorar para el próximo año y convocarlos en tiempo y forma. Y respecto a la relación con el PP… No son tensiones, pero fricciones propias de dos partidos diferentes que están cogobernando una institución sí que existen. No hay por qué negarlo. Pero sí me gustaría dejar claro que el PP tiene que entender una cosa, y es que ha perdido la mayoría absoluta en esta institución. Lleva varias décadas gobernando con mayoría absoluta, pero este año no. Y está en un pacto de Gobierno con Ciudadanos. Y hemos venido a traer estabilidad, pero tenemos que aportar el dinamismo que de alguna manera les faltaba, frescura, transparencia y consenso. Pero en esa parte tenemos que poner todos de nuestro lado.
–¿Tiene la sensación entonces de que falta el entendimiento de que se está cogobernando?
–Es que no es un Gobierno en solitario, sino en el que estamos cogobernando Ciudadanos y PP.
–Un cogobierno que no se visualiza cara afuera como el de Mañueco e Igea, quizá.
–Nuestra máxima prioridad es que esta institución funcione y darle servicio a la gente de los municipios. Más alá de las fricciones propias debemos llegar a un consenso y tomar decisiones unísonas que beneficien a los ciudadanos.
–El año 2019 ha sido un bombardeo electoral con muchas lecturas. ¿Cómo las han interpretado?
–Es evidente que las urnas, en el último proceso electoral después del buen resultado de abril y de las autonómicas y municipales, no han sido los esperados. Ese balance no me corresponde, pero creo que no supimos trasladar nuestro mensaje a la ciudadanía, porque está claro que los resultados no lo avalaban.
–Tienen tres años para trabajar y evitar que el batacazo se traslade a las autonómicas y municipales. Usted, por su puesto, tiene cierta responsabilidad de encontrar y recabar apoyos y candidaturas en los municipios.
–Si hubiera elecciones autonómicas no creo que se trasladara el batacazo, estamos cogobernando en varias comunidades autónomas, capitales de provincia, municipios… No hemos dejado de trabajar. Y creo que Ciudadanos es un partido necesario, de centro, reformista, de consenso. Hemos acabado con las mayorías absolutas y es necesario diálogo y consenso. Después de esta asamblea va a salir una líder, su equipo, unos estatutos y Ciudadanos se va a reforzar más que nunca.
–¿Temen al desgaste de las coaliciones? En Valladolid, VTLP perdió un concejal y el PSOE salió reforzado. ¿Puede darse un efecto similar en Junta o Diputación?
–Lo que tienes que hacer es gobernar para los ciudadanos y mirando de frente a los ciudadanos y no de espaldas como se gobierna a veces. Las coaliciones, en una época en la que han desaparecido las mayorías absolutas, son necesarias. Y no debería afectar en ningún caso.
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