La Junta alega que cumplió en verano los servicios mínimos en los turnos del Zambrana

Los responsables de la Administración regional añaden que el aforo de las unidades de convivencia apenas ha sobrepasado algunos días la mitad de lo autorizado. El área de socialización puede acoger a 22 menores, pero los datos que traslada el equipo de la consejera y vicepresidenta Isabel Blanco es que «la ocupación durante el verano ha oscilado entre los 9 y los 13 usuarios».

El mismo argumento, el de cumplimiento de la legalidad, esgrimen fuentes de Familia e Igualdad en los procesos para cubrir vacantes y bajas en el centro que acoge a menores infractores y que protagonizan conductas disruptivas reiterativas . «Todos tienen la titulación exigida en el convenio colectivo», remarcan. Rebaten también que los trabajadores nuevos carezcan de formación para cumplir las tareas que les exige el trato diario con los menores del centro.

En el centro Zambrana, único de la comunidad específico para menores con expediente de protección por problemas serios de comportamiento social y preparado para el ingreso de menores condenados o a la espera de juicio, trabajan en torno a 200 personas entre el personal de la Junta y de entidades privadas con las que la Administración tiene contratados servicios.

Los problemas de comunicación teléfonica que expone el personal que trabaja en los hogares se han debido a una «migración del sistema» que ha llevado a cabo el operador de telecomunicaciones que tiene contratado la Junta. «Ante la aparición de problemas técnicos durante este proceso, la Gerencia de Servicios Sociales ha habilitado terminales móviles para garantizar la comunicación de los equipos de atención directa», puntualizan desde la Junta.

Uno de esos teléfonos entregados al personal está 'extraviado', añaden fuentes oficiales, que no comparten las críticas sobre la falta de funcionamiento del botón antipánico del que dispone el personal de atención directa para pedir ayuda ante un altercado o una agresión. «Estos dispositivos se revisan semanalmente por el Personal de Seguridad», rebaten, al tiempo que subrayan que existen protocolos de protección de los trabajadores que refuerzan «el control visual directo del personal de seguridad en casos en que los menores tengan inestabilidad conductual y reduciendo sus tiempos de respuesta en los casos en los que se requiera su intervención».

Las carencias de atención psicológica de este verano se enmarcan, según la consejería, en la baja temporal de la profesional que se encargaba de los chavales del área de socialización. Se produjo a finales de julio. «Desde la dirección del centro remitieron con celeridad los informes para la tramitación del procedimiento de sustitución», remarcan. Ese trámite acaba de culminar y la persona sustituta se habrá incorporado esta semana. Eso no quiere decir que no se haya prestado ese servicio desde julio hasta ahora, inciden fuentes oficiales: «Durante este periodo la subdirectora técnica, con cualificación de psicóloga, ha coordinado la atención de las necesidades psicológicas de los menores».