Sansón F. M. tenía 18 años cuando salió de fiesta en Nava del Rey con José C. C., el novio de su madre, aquella noche de viernes 7 de septiembre de 2018 que actuaba Camela en la localidad, inmersa en plena celebración de los festejos ... de Los Novillos. Según el relato de hechos que realiza la Fiscalía de Valladolid en su escrito de acusación provisional, hacia las 7:15 horas del 8 de septiembre, de regreso a casa los dos por la carretera de Castrejón, cuando se encontraban a la altura de los números 10 a 14, se desató una discusión entre ellos «por motivos no exactamente conocidos». Inmediatamente pasaron a las manos. El acusado golpeó a la víctima en la cara, ocasionándole erosiones «en concreto, en el caballete nasal, el pómulo izquierdo y en la parte frontal derecha y en región parietal derecha». Entonces, el novio de la madre sacó una navaja y acometió al joven acusado, al que produjo un corte en el dorso de la muñeca izquierda, pero este consiguió desarmar a su contendiente y le quitó la navaja que este blandía «sorteando así el peligro que para él existía, pudiendo terminar así la disputa».
Sección de la yugular
Sin embargo, lejos de zanjar la pelea, sostiene el fiscal, Sansón F. M., «con clara intención de dar muerte a José C. C., de 49 años, le lanzó hasta cinco puñaladas en la cabeza, alcanzándole en diversas partes de la cara y la cabeza, causándole la muerte cun una de ellas, al seccionarle la yugular «como consecuencia del corte profundo que le infirió en la parte superior derecha del cuello». Destaca el escrito de acusación pública las heridas defensivas que tenía la víctima en ds dedos de la mano izquierda. El fallecido dejó seis hijos, dos de ellos, menores de edad cuando ocurrió el crimen.
Para el ministerio público, Sansón F. M., que residía en Medina del Campo con su padre y sin antecedentes penales hasta el día de autos, es autor de un delito de homicidio y solicita que se le imponga una pena de 12 años de prisión e indemnizaciones para los familiares (hijos, padres y hermanos) de la víctima que suman 460.000 euros, más los intereses legales.
Mayores penas solicitan las acusaciones particulares, personadas en representación de tres de los cinco hijos del fallecido, que califican los hechos de asesinato y piden para el procesado penas de 25 años de prisión. Para ellos, el procesado siguió «un plan preconcebido» para vengarse porque habría presenciado ese fin de semana malos tratos hacia su madre y además había huido del lugar del crimen con el vehículo del fallecido y fue detenido en el hospital de Medina, tras sufrir un accidente de tráfico. Los tres hijos personados, Rafael y Javier C.G. y María Montserrat C.R, piden 100.000 euros para cada uno, en lugar de los 80.000 que el fiscal solicita para los dos primeros y los 50.000 euros para la tercera.
La defensa argumentará ante el jurado que su representado fue autor de un homicidio que no pretendía cometer, motivo por el que solicita la absolución basándose en la circunstancia eximente de legítima defensa. Alternativamente, pide al tribunal que se le imponga una pena de uno o dos años de prisión por la atenunate de provocación o arrebato. Sostiene el letrado defensor que se trata de un homicidio preterintencional que resultó de que su cliente fue víctima de una violenta agresión del novio de su madre, que sacó una navaja. El hombre fallecido tenía antecedentes penales por delito de lesiones y fue investigado por la policía por estar involucrado en un homicidio.
El juicio con jurado popular arrancará el próximo viernes 23 de octubre en la Audiencia de Valladolid, Sección Segunda. En la primera jornada se constituirá el jurado y previsiblemente declarará el acusado. El 26 declararán testigos y el 27, los peritos.