Valladolid

Investigan una violación a una joven de 18 años por parte de un «trinitario»

La presunta violación la relató un día más tarde la víctima, con ayuda de un amigo y después de que tuviera que ser atendida a la altura de la avenida de Salamanca. Allí solicitó la presencia de emergencias por unos recurrentes mareos y de forma tímida y ante una agente de la Policía Local empezó a relatar que «había algo más». De hecho, el Hospital Río Hortega de Valladolid activó el protocolo de agresiones sexuales.

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Ese «algo más» sucedió en el entorno de El Corte Inglés en la noche del miércoles. En ese momento sufrió uno de esos desmayos y fue ayudada por un grupo de seis personas que allí se encontraban (cuatro chicos y dos chicas), que la dieron de beber supuestamente agua. Se trasladaron a la plaza del Ejército y allí se quedó a solas con el presunto violador. Sin que ella le autorizara, continúa la joven, la cogió de la barbilla y la dio un beso en la boca, hecho que ella le recriminó, si bien la respondió que había hecho una «apuesta» tras una carrera en patinete.

A pesar de todo, los tocamientos continuaron y la joven tuvo que exigirle que parara, que no quería nada. Acto seguido se fueron paseando por el Paseo de Zorrilla en dirección Covaresa y durante el trayecto la llevó cogida de la mano.

Finalmente, ya en el portal del presunto agresor, por las cercanía del centro comercial, la joven accedió a entrar y bajaron a los trasteros. En un cuarto oscuro y pequeño la retuvo. Fue en ese lugar donde tuvo lugar la presunta violación.

El relato ante los agentes llegó 24 horas después, pues la víctima tenía miedo de denunciar los hechos porque cree que su agresor pertenece a la banda latina de los Trinitarios y teme que pueda tomar alguna represalia contra ella.