Guardia Civil

Interior descarta abrir más cuarteles en Valladolid y vuelve a dejar en el aire el de Zaratán

Dicho «traslado», no obstante, apunta de manera inequívoca a la desaparición, léase cierre, de otro puesto de la provincia. ¿Cuál? Pues continúa siendo una incógnita toda vez que el subdelegado ha vuelto a dejar en el aire si el personal llegará de Zaratán o de otro punto de la provincia.

Lo que sí ha querido dejar claro, al menos, el subdelegado, es que «la Dirección General de la Guardia Civil tiene claro que no se va a incrementar el número de cuarteles en la provincia», es decir, que la apertura de un nuevo puesto, como el de Arroyo (el proyecto está ya adjudicado y cuenta con un corto plazo de ejecución de siete meses), supondrá inevitablemente el cierre de otro. Pero no solo eso. En cuanto al proyecto en ciernes de abrir un nuevo cuartel en Aldeamayor de San Martín, cuyo Ayuntamiento ha ofrecido ya un terreno a la Benemérita, su posible apertura vendría a implicar el 'traslado', léase cierre, de otro puesto. Este último proyecto, no obstante, aún está «muy verde», tal y como ha reconocido el propio Jacinto Canales.

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El caso es que a día de hoy, y cuando acaban de cumplirse diez años (el pasado 21 de abril), de la apertura del puesto 'temporal' de Zaratán, que sustituyó al malogrado cuartel de Puente Colgante de la capital (hoy reconvertido por fin en viviendas, aún sin ocupar, para jóvenes), Interior mantiene en el aire su futuro y pone ahora en vilo al resto de acuartelamientos de la provincia al no concretar que puesto será el elegido para su 'traslado', léase cierre, al futuro cuartel de Arroyo de la Encomienda.

De manera, y en resumen, que en Valladolid no se incrementará el número de cuarteles de la Guardia Civil sino que la apertura de los nuevos, Arroyo por ahora y quizás Aldeamayor a largo plazo, supondrá el cierre, 'traslado' en términos del subdelegado, de otros puestos.

«La Dirección General de la Guardia Civil tiene muy claro que el servicio y la operatividad no se pueden ver mermadas y que incrementar el número de cuarteles significaría que hay que incrementar el número de agentes que están en esos cuarteles y que eso restaría operatividad al resto de puestos», ha explicado el subdelegado antes de incidir, por segunda vez en 24 horas, en cuanto al futuro de los puestos de Zaratán y Arroyo, en que «no será un cierro sino un traslado y se trasladará a algún puesto (sin concretar) a Arroyo cuanto esté (en un año a lo sumo) el nuevo cuartel que se va a empezar a construir y que ya está adjudicado». Esto último, ha concluido, «va a significar que se va a mejorar las prestaciones de la Guardia Civil en la zona, y no solo en Arroyo». ¿Habrá dos puestos adosados a la capital? Es una incógnita.