Vox inicia una recogida de firmas para retomar el soterramiento en Valladolid

El Grupo municipal Vox ha iniciado una recogida de firmas en el portal web Change.org para solicitar la paralización del proyecto de integración en superficie y destinar «los 175 millones de euros ya previstos» al soterramiento de las vías del tren en un tramo de 2,5 kilómetros. La formación de Santiago Abascal, que en Valladolid cuenta con un representante, el concejal Javier García Bartolomé, reactiva de nuevo la petición del soterramiento mediante una serie de reuniones con colectivos sociales y vecinales donde plasma su postura para conseguir apoyos e impulsar esta recogida de firmas, que desembocará, como fin último, en una consulta popular para que los vallisoletanos «expresen su parecer». «Ya hemos mantenido recuniones con asociaciones de vecinos, con la CVE y la Cámara de Comercio y tenemos previsto continuar con la Federación de Asociaciones de Vecinos Antonio Machado y otros colectivos. Queremos que conozcan nuestra propuesta y que no se dé el soterramiento por perdido», esgrime el edil de Vox.

Para poder llevar a cabo la consulta popular que Vox ya anunció en un pleno de este mandato plantearán una modificación del Reglamento de Participación Ciudadana con el fin de «flexibilizar» los modos de poder programar este tipo de consultas.

No obstante, Vox presentará este jueves al Pleno de presupuestos una enmienda para que los 8,6 millones que el Ayuntamiento aportará el próximo año para completar la integración en superficie se destinen a un soterramiento «corto» de 2,5 kilómetros, y que desestime la construcción de una nueva estación de tren «que no es necesaria».

En total, según argumentó Javier García Bartolomé, Vox presentará ocho enmiendas a los presupuestos municipales, que sumarán cerca de 14 millones de euros. Las más destacadas serán la referida al soterramiento, la que pretende acabar con el «catastrazo», que supondrá un incremento en el recibo del Impuesto de Bienes Inmuebles y un Plan Renove de automóviles con el que mejorar la calidad del aire y potenciar la industria automovilística. En este caso, la propuesta, que se financiaría con «el 1,6 millones de euros de superávit de la ORA», consistiría en apoyar con 1.000 euros la sustitución de vehículos de más de diez años y mil euros más cuando se hayan fabricado en Castilla y León.