Valladolid

Ingresan en el Zambrana dos de los menores detenidos por el ataque con machetes

Dos de los menores (están vinculados los tres a la banda latina Dominican Don't Play) declararon en calidad de testigos este jueves en la Fiscalía de Menores por la agresión que recibió un compañero de banda en la avenida de Soria a primeros de febrero de este año.

Precisamente esta comparecencia imposibilitó que dieran su testimonio en calidad de detenidos por la agresión a machetazos del miércoles al estar inmersos en pasados enfrentamientos que podrían vincularse entre sí. Así que estos menores han estado custodiados en dependencias de la Policía Nacional hasta este viernes, momento en el que han pasado a disposición judicial por unos hechos que conmocionaron a los viandantes de la zona de San Pablo a la hora de comer.

De esta forma, este jueves acudieron dos de los detenidos, ambos de 17 años y de origen venezolano y español, que en febrero fueron víctimas de una agresión con palos y armas blancas por parte de miembros de su banda rival, los Trinitarios, y en la que otro menor, amigo de los ahora detenidos, quedó gravemente herido. De hecho, por esta agresión dos miembros de los Trinitarios, entre ellos un presunto cabecilla dentro del organigrama, fueron detenidos. Este ingresó en prisión, mientras que el otro, de 14 años, entró en el centro de menores Zambrana.

Ahora las tornas han cambiado, al tener que declarar como presuntos autores de la agresión a un joven de origen marroquí, que precisamente en los atestados de la Brigada Provincial de Información de la Policía Nacional figura también, en al menos una ocasión, como miembro de los Dominican Don't Play. De hecho esta misma víctima en julio del año pasado sufrió un robo con violencia además de ser agredido por personas vinculadas a los Trinitarios.

A pesar de todo, el herido por armas blancas de este miércoles pidió en la madrugada de este jueves el alta hospitalaria voluntaria. Acto seguido fue visto, con vendas en la cabeza y en el brazo izquierdo, por las inmediaciones de la residencia de protección José Montero, a la que llegó procedente de Zamora.