Un increíble dúo arquitectónico que desafía las convenciones en el casco histórico de Laguna

La envolvente del edificio no pasa desapercibida para nadie. Es imposible. Está realizada con paneles de hormigón prefabricado de 11 metros de longitud tratados con un ácido especial, que al contacto con el aire, aporta un característico color anaranjado que hace que el edificio tenga mayor presencia y se diferencie, aún más, de los colindantes. Sin duda, una elección audaz por parte de sus propietarios, que ayuda a redefinir el paisaje del casco urbano de Laguna de Duero y a fusionar la tradición y la vanguardia.

«La casa tiene un lenguaje muy moderno. La fachada utiliza un sistema prefabricado modular, pero también es tradicional, ya que nos hemos tenido que adaptar a lo que marcaba la normativa urbanística, para lo cual, hemos tenido que construir un alero y la cubierta tenía que ser de teja», señala Muñoz. «La fachada lleva muchísimo trabajo de medición, pero lo que fue el montaje, tan sólo duró dos días. Lo último que se montó, curiosamente, fue la cubierta», puntualiza Gustavo, uno de los propietarios.

Ambas casas comparten entrada a la altura de la calle, pero en la entreplanta se separan haciéndose totalmente independientes. Entramos en la primera de ellas, que pertenece a Juan Carlos y a su mujer Alicia. Nos encontramos con un interior que rompe y supera todas las expectativas. Se distingue por una triple altura que conecta de manera ingeniosa todos los rincones del espacio. Esta distribución en diagonal y en sección crea un gran dinamismo que se mantiene en toda la vivienda. El salón-cocina-comedor es una estancia que lo tiene todo. En ella percibimos una sensación de amplitud y conexión entre los distintos niveles. Una obra maestra de diseño interior fuera de lo convencional. La gran protagonista de este espacio es la escalera flotante. De madera, empotrada en la pared y con baranda de cristal. Sin duda, se trata de una clara apuesta por el minimalismo y la creación de espacios limpios. Los peldaños parecen estar suspendidos en el aire, aunque realmente están sujetos a la pared con soportes especiales.

Ascendemos por ella y comprobamos que tiene luces con sensor de movimiento. En la segunda planta encontramos la zona de noche, con un dormitorio en suite con su propio baño y vestidor y dos dormitorios infantiles que comparten otro baño de estilo moderno y muy funcional. «Esta casa se configura entre medianeras. Es estrecha pero con los ventanales le hemos ganado luz y espacialidad», indica Abraham.

Ya en la tercera planta nos topamos con la gran joya de la casa, una enorme buhardilla, completamente diáfana que sirve de espacio multifuncional de juego, estudio, trabajo y ocio y que además está inundado de luz natural. Un lujo con acabados de madera que aportan calidez y textura y son el equilibrio perfecto entre lo moderno y lo atemporal. «La vivienda contiene una mezcla de materiales modernos y otros tradicionales. En las plantas inferiores el diseño es más industrial, hasta llegar a la planta superior donde optamos más por lo artesanal», indica Sergio Walter, arquitecto de AWA.

Nos dirigimos a la casa hermana, propiedad de Gustavo y de su mujer María. Él mismo nos la enseña. En contraste con la anterior, esta vivienda nos recibe con una apertura en esquina que maximiza la entrada de luz desde diferentes ángulos. Los espacios fluyen de manera orgánica y su distribución nos despierta la curiosidad. Sus amplios ventanales permiten que la luz natural inunde cada rincón en el que no falta un detalle. La escalera destaca por un gran parapeto de forja, en estilo modernista, que le aporta gran originalidad y belleza. La cocina conecta con el salón y dispone de una gran isla de diseño italiano de la marca vallisoletana Alara. Allí encontramos, además, la salida a una gran terraza con vistas a la calle. «Es la casa de nuestros sueños, pero nos ha costado verla acabada. Nos pilló la pandemia y el temporal, que lo complicó todo. Estamos encantados con el resultado», explica Gustavo, ingeniero de profesión y que ha participado muy activamente en el proceso constructivo.

En la segunda planta también se sitúa la zona de noche, con dormitorio en suite, que destaca por un original cabecero que sirve de separador con el vestidor y que ha realizado el propio Gustavo. En él ha reaprovechado la madera de la obra. Vemos la zona del vestidor, muy bien distribuido y el baño con unos acabados perfectos. En la misma planta hay también otros dos dormitorios y un baño para los más pequeños de la casa. «Ambas casas tienen el mismo programa, pero cada una está pensada a la medida de sus propietarios y sus necesidades», dicen los arquitectos.

Alcanzamos la tercera planta. La apoteósica tercera planta. En ella se encuentra otra impresionante buhardilla bañada con acabados en madera y grandes ventanales de techo a suelo con un parapeto exterior de cristal como medida de seguridad. Llevan triple vidrio, carecen de cajonera de persianas para evitar las filtraciones de aire y curiosamente tienen escondidos los tiradores. Son de color antracita, que resaltan con la madera del techo. Todos estos detalles conforman un espacio acogedor que ofrece unas impresionantes vistas de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Tiene un área de juego para los más pequeños, zona de estudio y trabajo, y también de ocio y relax. Entre la decoración encontramos viejas guitarras que nos dejan adivinar el espíritu rockero de su dueño, quien confiesa que en su juventud tocó con figuras de la talla de Fito, y con grupos como Extremoduro y los Celtas Cortos. «De lo mejor que tienen estas casas es el aislamiento que las recubre, que es de unos 20 centímetros. Tienen además aerotermia y recuperador de calor, con lo cual, el consumo es prácticamente nulo. Se han evitado por completo las infiltraciones de aire y con ello hemos conseguido que en invierno el gasto de agua caliente y calefacción sea tan sólo de unos 30 euros mensuales», completan los arquitectos de AWA. «Además, al tener recuperador de calor, la casa se ventila de manera mecánica, de esta manera, el aire siempre está limpio y no es necesario abrir las ventanas. La temperatura es constante en todas estancias. El confort es total», prosiguen.

Nos ha encantado poder disfrutar de este home tour por este dúo arquitectónico en Laguna de Duero. ¿Y tú? ¿también lo has disfrutado? Pues entonces no dejes de visitar nuestra sección 'Bienvenidos a mi casa'. En ella encontrarás muchos otros espacios singulares, como esta increíble vivienda unifamiliar de aires modernos pero con toques tradicionales, o este alucinante loft de estilo brutalista en la cota más alta de Valladolid, o este bellísimo dúplex adosado 'de revista' en La Galera

Características

Año de construcción: 2022

Superficie: 210 metros cuadrados útiles cada casa

Dormitorios: 3 dormitorios cada casa

Baños: 3 cada casa

Buhardilla diáfana

Estándar passivhaus (sin certificar), aerotermia, suelo radiante y refrescante y recuperador de calor