Herida grave una conductora tras caer cuatro metros boca abajo con su coche en el aparcamiento del Río Hortega

Los propios sanitarios del centro han acudido en primer lugar a atender a la víctima, que quedó atrapada en el asiento del conductor, si bien sufrió lesiones graves (varias fracturas) y permanece ingresada con pronóstico reservado. «Un milagro», en definitiva, según lo han descrito testigos presenciales del accidente ocurrido a las 9:30 horas de hoy. Y también para una enfermera que se encontraba allí y qué vio cómo el vehículo caída delante de ella, por suerte, sin tocarla.

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El siniestro tuvo lugar cuando la víctima estaba estacionando en la planta de superficie y fruto de un evidente despiste pudo acelerar al realizar la maniobra hacia delante, superó los bolardos, derribó el murete y acabó cayendo de morro sobre la planta inferior, desde una altura de unos cuatro metros. El coche, un Mercedes automático, golpeó contra el asfalto y acabó voletado boca abajo sobre otro estacionado, un Hyundai blanco, sobre el que se empotró del lado del maletero y quedó destrozado. La conductora del vehículo siniestrado, que llevaba el cinturón abrochado, quedó atrapado boca abajo sobre el asfalto con el coche levantado sobre el Hyundai.

«La conductora debió acelerar cuando estaba aparcando con un modelo automático, no frenó y acabó precipitándose hacia delante y cayendo de frente, primero, antes de volcar boca abajo sobre otro coche estacionado», han confirmado fuentes policiales.

La mujer de 66 años, eso sí, fue evacuada con varias fracturas al propio centro sanitario, donde permanece ingresada. Sanitarios, bomberos y policías locales la ayudaron a salir del vehículo para ser explorada de las heridas sufridas. Un susto, en definitiva ocurrido al final del aparcamiento del hospital, del lado que mira a la carretera de Segovia.