«¡Te lo dije esta mañana cuando me llamaste por los dos quintos! que me ibas a volver a llamar por el Gordo, tenía esa premonición, sabía que este año era el año», manifesta entusiasmada la lotera de la Administración de Hospital Militar, 2. Para ... Belén Cima González, lo mejor de todo es que es la primera vez que su despacho vende un primer premio del sorteo extraordinario de la lotería de Navidad. Y vende mucho en esta época del año. Subraya que tiene entre sus clientes habituales a unas doscientas empresas y bares de Valladolid, además del trasiego que tiene su despacho porque esta ubicado entre la estación de autobuses y la de tren. Aunque reconoce que «nunca habría recomendado un número tan feo. ¡Yo no lo hubiera comprado nunca!», confiesa entre carcajadas. Con toda probabilidad, indica, habrá vendido el décimo en ventanilla «a una de esas personas que me piden el número más feo que tenga».
Publicidad
Noticia relacionada
Feo pero con suerte. El 88008 ha dejado en la capital y provincia de Valladolid dos millones de euros salpicados en cinco décimos sueltos, la mayoría, como el café, «de máquina». A Fernando Galindo Álvarez, que lleva 41 años despachando billetes de la suerte en la administración de Vadillos (que tiene medio siglo de edad), le sabe especialmente bien porque, aunque es un despacho muy afortunado en otro tipo de apuestas, como la Bonoloto, «que sea el Gordo de Navidad es muy especial, y es la primera vez, por eso tengo mucha satisfacción». El décimo de «resguardo azul» lo ha vendido por el terminal y mediante este formato es mucho más difícil de rastrear al comprador pues, como indica el veterano lotero, «nos permite llegar a todos los barrios y rincones. Apunta que, seguramente, »es un décimo que ha salido con un número aleatorio, incluso rechazado con anterioridad«.
Teniendo en cuenta que desde los años ochenta del pasado siglo el Gordo no dejaba su estela en Valladolid, el 88008 ha caído estupendamente, con los 400.000 euros al décimo. «Sabe muy bien y es una publicidad muy buena. Ahora, a cargar las pilas para el Niño», se anima Fernando Galindo.
En Arrabal de Portillo, el sobrino de María del Carmen Gómez, la titular del despacho de lotería, también está pensando ya en el Niño. Luis subraya que para eso están, para «todo lo que sea alegrar y cumplir los sueños de la gente, que en eso consiste este trabajo». Tampoco sabe la identidad del comprador del décimo premiado, máxime cuando es «de máquina» pero especula con que seguramente será de la zona porque «normalmente es gente habitual y será alguien de los que siempre piden que en el décimo se repitan los números y que tenga ceros».
Publicidad
Noticias relacionadas
«Aquí estamos celebrándolo con champán como si nos hubiera tocado a nosotros». Ana Beatriz, gerente del bar Río Mar de Laguna de Duero, dice que hubiera preferido que el billete afortunado hubiera sido el número que puso a la venta el establecimiento y no de la máquina, pero que están entusiasmados igualmente. «Es la primera vez que damos el Gordo y tiene que ser algún cliente habitual. Estamos muy contentos porque este es un bar al que viene mucha gente trabajadora», subraya.
En Castilla y León, además de Valladolid, el primer premio de la Lotería de Navidad ha caído en Poyales del Hoyo (Ávila), Becerril de Campos (Palencia), Almazán (Soria), en las capitales de Zamora y Salamanca y en la localidad salmantina de Peñaranda de Bracamonte.
0,99€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.