La fiesta toma impulso al ritmo de las casetas de la Feria de Día

La gran mayoría de las casetas se agrupan y comparten espacios más transitados, aunque algunas han preferido mantenerse próximas a sus locales. Así, por ejemplo, en la calle Kilimanjaro del Pinar de Jalón se encuentra la de La Geniaaal Vermutería; y en la avenida Medina del Campo, en Arturo Eyries, la del ya clásico Barlladolid. En la calle Rastro, se encuentra Talavera Gastronomía y Trasto, en la calle Menéndez Pelayo. En Cadenas de San Gregorio, se puede tapear en Zaska y Gondomatik.

Aunque tienen los negocios en Villa del Prado, las casetas La Teta y La Luna, Andiamo y Turuleca se ubican en el Paseo de Zorrilla, frente a la plaza de toros, al igual que La Castellana, que ha bajado desde Parquesol. Los recién abiertos Lucense y Raza completan la oferta de esta zona.

Cristina Álvarez, de La Castellana, señala que «se va notando el jaleíllo aunque de momento es menor que otros años», posiblemente por la subida de precios. Triunfan sus chapatinas y la piruletas, pero también las corquetas caseras. Además, piensa que como hasta el jueves no hay festejos taurinos esta zona no está tan llena. De hecho, también sus compañeros de casetas apuntan que el domingo se notó una mayor afluencia de gente con la celebración en el coso de la Liga del Corte Puro.

Gonzalo Valdivieso, de la caseta del Lucense y el restaurante Raza, coincide en que «por ahora está un poco flojo», aunque no puede comparar con la última Feria de Día, la de 2019, porque estos establecimientos han abierto hace unos meses. La berenjena frita es la tapa reina.

También para Matías Aguirre, de Turuleca, es el primer año de caseta. El hostelero se muestra muy contento porque «la gente está respondiendo muy bien» y adelanta que a partr de ahora vienen los mejores días. La fajita mexicana está despertando devoción entre la clientela, pero también el pincho moruno y los torreznos de Soria.

Álvaro Aguilar, de Andiamo, comparte la satisfación con el anterior y resalta que «esta zona, que se anima todos los días con conciertos, es muy buena». Zona en la que han puesto la caseta tres años antes de la pandemia. Ofrece siete pinchos de feria distintos, además de raciones variadas, aunque los más solicitados son la chapata de calamares y el el bocadillo de solomillo al roquefort.

Aunque el lunes estuvo más tranquilo, Victoria Díaz, encargada de la caseta de La Teta y la Luna, asegura que el fin de semana recibieron muchas visitas y espera que aumente el jaleo con los toros. La tapa más solicitada es el bocatín de bacalao. Es el cuarto año en el Paseo de Zorrila para este local de hostelería de Villa del Prado.

La Acera de Recoletos, donde se sitúan las casetas de Mamatako, Pera Limonera, Amberes, Lunático, La Dársena de la Victoria, Las Kubas, Azalea (hotel Felipe IV), Manatial, Chester, Groove y Gastrobar Sabores, es un espacio muy visitado.

David Miranda, de Las Kubas, asegura que «se respira en el ambiente que la gente tiene ganas de celebrar» y aunque no tiene la referencia de años anteriores porque es el primer en tener caseta, se muestra contento. Todas las mañanas ofrecen guiso del día junto a los pinchos de feria y las raciones. La brocheta de lagarto (ojo que el animal denominado de esa forma está protegido; se trata de una pieza del cerdo) y el cucurucho de rabas son dos de las tapas que mejor están fucionando. Entre las bebidas de esta caseta, destaca el tinto de verano y el conocido como 'Lorencito'.

Lorena Romero, encargada en Lunático, explica que a partir de las dos de la tarde se anima la calle con el tapeo de los compañeros que salen de trabajar. Por supuesto, por la tarde, hay más animación por toda la ciudad. Apunta que una de las tapas que está triunfando es el brioche de chistorra con cebolla frita y mayonesa de sriracha. También el bao de panceta. Algunas casetas tienen también algo dulce como en esta que hay tarta de queso y de tiramisú.

Alejandro Juan Cordovilla, de la caseta de Groove, confía en que la actuación el jueves en la Plaza Mayor del estadounidense Jason Derulo anime todavía más las calles. Este establecimiento que se ubica en Huerta del Rey es famoso por sus ricas tortillas de patatas que no pude ofrecer en la Feria de Día. Pero sus clientes pueden disfrutar sus montaditos y tostas, entre las que prima la de gambas.

También hay mucho que saborear en las casetas de los alrededores de la Catedral. En la plaza de la Universidad, ofrecen sus tapas Fierabrás, Santuario, El Pasaje, Milana Beerhouse Paraíso, The Bowie, El Decano, Deltoya, El Capote de Mario, La Biblioteca y Don Enrique. La Solana está junto a la iglesia de Santa María de La Antigua en la calle Solanilla. En Cardenal Cos, están las casetas de Caribou y Neverland. Muy cerca, en Portugalete, Taberna Pucelana, El Barco, La Mafia, La Cacatúa y El Primero.

En la zona de San Benito y la plaza de la Rinconada, se agrupan las casetas de El Consejero del Rey, Madame X, Jamonería Sarmiento, Dos Mujeres al Borde de un Ataque de Nervios , Taberna San Benito, La Casa de la Sepia y El Pulpo, Ángela, Guantánamo y La Cartuja. Luz Gutiérrez, de Jamonería Sarmiento, cree que «está un poco más flojo que 2019 pero no falta gente». Myriam Frechilla García, que atiende en esta caseta, es una de los más de 700 jóvenes contratados para atender estos días en la Feria de Día.

En Fuente Dorada y la calle Ferrari ofrecen tapa y bebida Le Bistro, La Tapilla, Fuego, Argolla, 100 Montaditos. En la calle Pasión, los hacen La Mejillonera y Los Zagales; en la plaza Santa Ana, Angelillo, La Pera, Lete's y Rioluz Gastronomía.

En la plaza Martí y Monsó o plaza Coca, participan en la Feria de Día Caroba, Los Guajes y Wabi-Sabi Taberna Japonesa; en la calle Calixto Fernández de la Torre, se encuentran La Criolla, Taberna del Herrero y Zumo. Muy cerca, en la calle Campanas ofrecen el pincho de feria y otras delicias La Mordidita, Taberna Pozo y Vino Tinto. En la calle Correos, también promocionan la gastronomía local El Corcho y El Peso.

Algunos hosteleros no han puesto caseta, pero se han sumado al tapaeo interior de la Feria de Día. En concreto son 43 establecimientos los locales de esta modalidad desperdigados por toda la capital. Sirva como ejemplo la plaza de Juan Pablo II, donde Andiamo Di La, No Dejes de Soñar, Turuleca (además tiene caseta junto a la Plaza de Toros) y Verde Oliva ofrecen la posibilidad de hacer una buena ruta por el barrio Villa del Pardo. Aunque sin caseta, están en el meollo negocios clásicos como Don Bacalao (plaza Santa Brígida), La Teja y Belmondo (ambos en la plaza Coca), Brasería Poniente (plaza del Poniente), Astrolabio (plaza San Juan) Herbe (calle Correos) y Moka (Paseo de Zorrilla).

Los clientes, satisfechos, destacan que ha mejorado la calidad y ja aumentado la variedad de las tapas de la Feria de Día y agradecen que no haya masificación porque se llega a las barras para pedir sin tener que darse codazos. Queda tiempo para disfrutar hasta el próximo domingo, 11 de septiembre.