Fernando Simón se convierte en una figura más en un belén navideño de Valladolid

Allí, en el escaparate, Simón ha encontrado acomodo entre una constelación de personajes famosos recreados con fimo, una pasta para modelar, endurecida después de pasar por el horno. Es, posiblemente, el belén más divertido de Valladolid. Un catálogo de celebridades (de Trump a Rosalía, de Óscar Puente a Leo Messi, de Ronaldo a Pablo Echenique) que esta Navidad incorpora nuevos fichajes.

Están Michael Robison y Sean Connery (fallecidos este año), el rey emérito, Juan Carlos, con rifle y elefantito... y Fernando Simón.

«Era imposible no incluirlo», dice Regina, quien reconoce que no ha sido un personaje difícil de reproducir. «Tiene unos rasgos muy marcados: los pómulos, la barbilla. Y, sobre todo, las cejas». Para hacerlas, ha recurrido a una amiga peluquera, para que le preste pelo canoso natural. «Luego le he puesto con una camisa oscura y una de esas chaquetillas de punto que lleva siempre». Y en su mano derecha, una curva que muestra la tragedia de la pandemia.

«Este año me he planteado si montaba el belén o no, porque además me ha costado conseguir los materiales, por falta de suministro por la pandemia. Pero mucha gente me ha animado a hacerlo. Al final, es una forma de poner algo de alegría a un año tan triste y de tener un recuerdo con las personas que de un modo u otro están sufriendo por el coronavirus: los que lo han vivido de cerca y los que no pueden estar cerca de los suyos, con tantas personas mayores como están solas», cuenta Regina, quien, aunque lo pensó en un primer momento, no ha incluido más referencias al virus en el belén. «Intenté poner algún personaje con mascarilla, pero es que no se les reconocía bien con la cara tapada». Así que lo desestimó. A cara descubierta. Como si en el montaje de esta farmacia ya estuvieran todas las figuritas vacunadas contra la covid.

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