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Un hombre se pone unos guantes durante la cuarentena. Ramón Gómez
Coronavirus en Valladolid: Las farmacias se quedan sin guantes: «Hay un nivel de demanda altísimo»

Las farmacias se quedan sin guantes: «Hay un nivel de demanda altísimo»

«No tiene que entenderse como una alarma; para la población no supone un problema grave», afirma el secretario de Asepal

Eva Esteban

Valladolid

Martes, 2 de junio 2020, 07:59

Primero ocurrió con las mascarillas y los geles hidroalcohólicos. También con los termómetros. Pero ahora, el «problema» está con los guantes. En la actualidad, prácticamente no existe oferta de estos protectores, ya sean de nitrilo, vinilo o látex. Las farmacias, además, tienen que hacer frente a la «altísima demanda». «Hay un problema de suministro porque la materia prima y la elaboración es más compleja. La demanda es muy alta y aunque sí que es verdad que está entrando un poco más de producto, todavía no es suficiente», reconoce el presidente del Colegio de Farmaceúticos de Valladolid, Carlos Treceño Lobato, quien señala que no se trata de una circunstancia que ataña únicamente a la red de la provincia, sino que es «algo que afecta a nivel nacional e incluso internacional».

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No obstante, Treceño, aunque desvela la «preocupación» por la escasez del producto, hace un «llamamiento a la calma» a la población e insiste en que «es más importante que nunca mantener las medidas de higiene para evitar que la mano vaya a la cara y pueda haber un posible contagio». «Cualquier desabastecimiento nos preocupa;esto es algo puntual e imagino que irá llegando más producto», asevera. «Usar guantes en determinadas actividades es importante, pero como medida de prevención hay que recordar que, si no hay, es muy importante la higiene con agua y jabón y con gel hidroalcohólico», continúa el representante.

Esta falta de suministro, sin embargo, «no tiene que entenderse» como sinónimo de alarma. Así lo defiende el secretario general de la Asociación de Empresas de Equipos de Protección Individual (Asepal), Luis Gil, quien afirma que no es un «problema grave para la población en general» porque, según recuerda, los EPIs están destinados «principalmente» a profesionales sanitarios. «Las medidas de higiene son súper efectivas para la población. Es como la función que hace el guante, que es de protección. Si te lavas las manos y usas gel te estás protegiendo de igual manera», argumenta. «Incluso con el tema del guante, como no estamos acostumbramos a ponérnoslo, seguimos tocándonos como si no lo lleváramos, por lo que en realidad la contaminación que podemos producir sigue manteniéndose», continúa.

«No es tan ágil»

Asimismo, sostiene que la demanda global, al ser «muy intensa», ha «saturado» las capacidades de producción de las empresas. «Los guantes desechables de látex, nitrilo o vinilo derivan de la misma materia prima, que es el caucho, y todo se fabrica fuera; incrementar la producción no es tal ágil como ha podido ocurrir con las mascarillas, porque para poner en marcha una línea de producción de estas características puedes tardar en torno a un año; el hecho de no poder incrementar a corto plazo las capacidades de producción, unido al alto nivel de peticiones, hace que el abastecimiento se ralentice», incide el secretario de Asepal.

Según las estimaciones de la entidad, que engloba a un centenar de empresas de todo el país, el suministro no retomaría un pulso usual hasta finales de año, «aunque no implica que los sanitarios no vayan a tener». «Es un problema a nivel global que se solucionará y volverá a haber material suficiente», sentencia.

Por último, Gil considera que «el mercado se ha vuelto muy especulativo», por lo que un «hipotético» incremento en el precio de los guantes desechables «no sería porque la entidad quiera, sino por el elevado coste». «Una limitación de precios podría tener el efecto contrario», sentencia.

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