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El anciano, que estaba ingresado en una residencia con sus facultades físicas y psíquicas muy deterioradas, iba a ser juzgado por la Audiencia de Valladolid en junioEl octogenario que se parapetó en su ático y disparó con su escopeta a los policíasque intentaban reducirle hace un año, José Antonio V. G., ha fallecido este pasado fin de semana en la residencia vallisoletana en la que había sido ingresado al ... tener sus facultades físicas y psíquicas muy mermadas. El anciano iba a ser juzgado en junio próximo por la Sección Segunda de la Audiencia de Valladolid, una vista que ya había sido suspendida con anterioridad el pasado mes de febrero. Para el encausado, que contaba 83 años, el fiscal había solicitado la libre absolución por su estado mental.
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El jubilado protagonizó el año pasado un tiroteo con su escopeta y disparó a la Policía desde la terraza de su vivienda en la calle Embajadores, el pasado 3 de mayo, donde se había atrincherado durante horas tras un altercado con sus vecinos. Tras una negociación fallida para que depusiera su actitud, los agentes entraron a la fuerza en el domicilio y tres de ellos resultaron heridos por el fuego cruzado. La acusación pública calificó los hechos de delito de amenazas y tres delitos de homicidio en grado de tentativa en concurso con atentado, pero consideraba que el anciano estaba enajenado y por ello entendió que procedía su absolución. La acusación pública solicitaba en su escrito de conclusiones provisionales que se le impusiera la obligación de seguir tratamiento médico externo durante diez años, así como la prohibición de acercarse a su vecino de piso a menos de 500 metros.
Más sobre el suceso
Ricardo Sánchez Rico
Después de su detención, el hombre fue hospitalizado en el Clínico por las heridas sufridas en el fuego cruzado con los GEO y tuvo que comparecer en el primer interrogatorio judicial por videoconferencia, una vez emitido el informe psiquiátrico.
El 21 de mayo pasado, el Juzgado de Instrucción 5 de Valladolid dictó orden de prisión provisional comunicada y sin fianza para el detenido, que tardó en ser trasladado al centro penitenciario por su delicado estado de salud.
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Desde la prisión de Villanblase remitió un informe al juzgado en el que se ponía de manifiesto «el deterioro físico» sufrido por el investigado desde su internamiento. «Se trata de un interno totalmente dependiente, incapaz de ponerse de pie y que necesita ayuda para comer y moverse, además de presentar confusión temporal«, se exponía en el auto judicial. Finalmente se determinó su excarcelación y que pasara a la tutela de su familia. Recientemente había sido declarada su incapacidad.
Justo cuando se cumple un año del suceso, se ha producido el fallecimiento del encausado. La defunción ha sido comunicada este miércoles a la Audiencia por la dirección de la residencia donde estaba ingresado, con el fin de que se cierre la causa penal.
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