La Universidad de Valladolid ha expulsado a diez alumnos residentes en el centro Alfonso VIII por su «flagrante y reiterado incumplimiento del protocolo covid», según resumió contundente la vicerrectora de Alumnos, Cristina de la Rosa.
Publicidad
Estos jóvenes, seis de ellos burgaleses, se ... vieron implicados en el origen del brote de coronavirus detectado en la residencia el 14 de octubre y cuya expansión obligó a aislar a 176 estudiantes que vivían allí. Como afectados primarios, los expedientados colaboraron en la localización de sus contactos cercanos para tratar de contener el brote. La rápida extensión hizo necesario el confinamiento general.
Más sobre el coronavirus
Berta Pontes de los Ríos
Cuando se levantaron las restricciones, «comenzamos a recibir los partes de incidencias de los vigilantes denunciando incumplimientos sistemáticos de las normas por parte de este grupo, precisamente el más implicado en el contagio», explicó De la Rosa. En esas irregularidades figuran salidas nocturnas o reuniones de varios jóvenes para beber en áreas anexas a la residencia estudiantil. A algunos se les achaca que vulneraron el aislamiento mientras esperaban la confirmación de sus positivos, exponiendo al resto de alojados a sufrir un contagio.
Sin embargo, los expedientados rechazan esos cargos y aseguran que «nos han echado por ser el foco, ha sido una vergüenza y una injusticia», denuncia uno de ellos que pide anonimato. Según su relato y el de otro de los expulsados «nos dieron 48 horas para recoger nuestras cosas y marcharnos». Alguno de ellos tuvo que alojarse «de prisa y corriendo en un piso con otros seis estudiantes más». También acusan a la UVA de «obligarnos a firmar una salida voluntaria para evitar 'manchar' nuestro expediente académico».
Publicidad
Estos jóvenes no niegan sus salidas pero dicen que «nunca superamos las 8 personas permitidas y siempre usamos las mascarillas». También reconocen que salieron a comprar en plena espera de resultados «tras consultarlo con la médico».
La vicerrectora de Alumnos recordó que todos los residentes «firmaron al alojarse una declaración responsable que han incumplido», tanto en las normas internas de la Alfonso VIII como de sanidad de la Junta. «Esto fue más allá de una gamberrada. Estamos en una crisis sanitaria y otros alumnos del centro mostraron su temor por estos comportamientos», reiteró Cristina de la Rosa.
Publicidad
La responsable de Alumnado explicó que el reglamento recoge esa salida en 48 horas en casos de explusión y que se «les ofreció la firma de una salida voluntaria» para anular los expedientes. Nueve de los diez jóvenes los firmaron, lo que desactivó el trámite de salida forzosa.
De la Rosa admitió que son los primeros expedientes de expulsión activados en la covid (hasta ahora solo ha habido «sanciones cautelares») y destacó el «buen comportamiento general de toda la comunidad universitaria».
0,99€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.