Entrevista a Raúl Díez Segovia, alcalde-presidente de la Cofradía de la Santa Vera Cruz

Raúl Díez Segovia, alcalde-presidente de la Cofradía de la Santa Vera Cruz

«Esperamos poder celebrar en nuestra iglesia la Semana Santa de 2025»

-¿Cómo se enteró del desplome de la cúpula del templo?

-Estuve aquí toda la mañana revisando las obras y me fui 20 minutos antes de que pasase. Cuando estaba llegando a casa recibí una foto y pensé que era un montaje, una broma. A los tres minutos me llaman y me dicen: ¡Oye, que no está la cúpula de la iglesia! Salí corriendo y cuando vine vimos que estaban todos los operarios bien, que no les había pasado nada: empezamos a subir para ver cómo estaba la iglesia.

-¿Su primera imagen, sus primeras impresiones?

-Según venía de casa por la calle Felipe II no vi la cúpula y se nos cayó a todos el alma a los pies. Subimos al coro porque a la iglesia era imposible entrar con todos los escombros y la nube de polvo que había y lo vimos todo. Ha sido muy duro. Nos quedamos impactados, ver nuestra iglesia y nuestro templo así. Fue un desastre total.

-¿Después de los años que lleva de cofrade pero recién llegado al cargo de alcalde presidente recién nombrado, ver aquello qué sensaciones le produjo?

-Llevo 45 años, soy cofrade desde los 2 años. La verdad que se me cayó el alma a los pies porque no deja de ser nuestra casa, pasamos muchas horas aquí. Muchas veces más que en nuestras propias casas y ver cómo estaba la iglesia, las imágenes… nos hundimos prácticamente todos.

-Una vez aquí, ¿cuál es su primera reacción? ¿Cómo empezaron a gestionarlo?

-Cuando llegué estaban ya la policía, los bomberos…Lo primero fue preguntar por las personas que estaban trabajando aquí, estaban todos bien. Luego ya fue un poco caos, empezaron a venir autoridades, vimos que ya no había más peligro de desprendimientos, la zona estaba más segura… Los bomberos no tuvieron que intervenir y ya empezamos las reuniones para ver cómo gestionar todo para empezar a trabajar y seguir funcionando y darle un poco de normalidad al asunto.

-¿Por qué realmente estaba en tan mal estado?

-Toda la iglesia sufrió un incendio en 1806 donde la madera quedó dañada. Se hizo un estudio hace 32 años. Se miró y nos dijeron que todo estaba bien. Ahora, cuando se ha hecho una cata, la madera estaba podrida, tenía carcoma, era polvo. Entonces tenía mucho peligro. Esto podía haber pasado hace 15 años, unos años… Entonces tenemos que dar gracias que esto ha pasado con las obras, con una seguridad que habíamos puesto. No estaba previsto que pasara, pero ha pasado. Son quinientos años y es imposible saber cómo está la madera hasta que no se abre. Esto no es una radiografía como en el cuerpo humano que se puede ver por dentro. Aquí o se abre o no se ve y claro, hasta que no se abre no se sabe el peligro que corre. En el momento que se ha abierto, la cúpula ha debilitado y ha colapsado.

-Ya han pasado cinco días, ahora con todo más reposado, ¿cómo se plantean el futuro?

-Vamos a intentar junto con los técnicos municipales y la empresa constructora recuperar la cúpula lo más rápido posible pero, hasta entonces, la cofradía seguirá funcionando en la Parroquia de San Miguel. Nos han abierto sus puertas, entonces los cultos y demás actos los haremos allí.

-Supongo que estos días estarán con temas burocráticos…

-Seguros, papeleo… Lo primero que nos ha preocupado son las imágenes, intentar sacarlas lo más rápido posible para que no sufran ningún daño, y ahora todo son papeles, reuniones con seguros y demás.

-¿Van a iniciar ustedes o alguien una investigación para intentar esclarecer lo sucedido?

-Aún no sabemos nada. Lo primero que hay que hacer es quitar los cascotes que pueden caer todavía y, una vez limpio, entrarán peritos y gente del ayuntamiento.

-¿Desde Patrimonio se han puesto en contacto con ustedes?

-Sí, se han puesto en contacto con nosotros todas las instituciones para darnos el apoyo y lo que necesitemos, pero la información de lo que se va a hacer, la peritación… De momento no se puede hacer hasta que la estructura no esté más segura.

-Y una vez que el proyecto empiece a ser una realidad… ¿Ya hablan de solicitar tramitación de urgencia, financiación… de futuro?

-Esto es imprevisible, no sabemos cuantía ni sabemos nada. La gente se está volcando mucho, nos están llamando muchas personas diciendo que quieren colaborar y preguntando que de qué manera pueden colaborar económicamente o ayudando a limpiar, por ejemplo. Son cosas que nos va solicitando la gente para poder colaborar. Es por esto que hemos puesto en marcha seguramente una cuenta cero para poder cubrir los gastos, aunque no es menos cierto que todavía no sabemos la cuantía. Se nos va a ir muchísimo más de lo que teníamos estipulado… Lo iremos viendo con el tiempo e iremos informando.

-Días intensos también con muchos mensajes de apoyo y gratitud…

-Efectivamente, sí. Porque es increíble cómo se ha volcado la gente, tanto las instituciones, cofradías, ya no sólo los cofrades de la propia cofradía, sino también la gente de la calle, los vallisoletanos… Incluso desde fuera de Valladolid estamos recibiendo de las vera cruces de España muchísimo apoyo, cariño, poniéndose a nuestra disposición para lo que necesitemos. Estamos encantados porque nos sentimos muy arropados por todo el mundo.

-Y con el pensamiento y el corazón puesto en la próxima Semana Santa, ¿cree que podrán volver a su iglesia para 2025 en que estas celebraciones serán la tercera semana de abril?

-Nuestra idea es que sí y esperemos volver a celebrar en nuestra iglesia la Semana Santa de 2025. Según las previsiones creemos que sí va a ser posible. Hemos hablado con la Junta de Cofradías, que según van avanzando las fechas sino podemos estar en nuestra penitencial, debemos de hablar de buscar otras alternativas, estudiarlas… Pero todavía es muy temprano para todo eso. Si se van acercando las fechas de octubre o noviembre y no tenemos constancia de que en Semana Santa podamos utilizar nuestro templo se buscarán alternativas de cómo montar las imágenes y cambiar la sede.

-¿Les han transmitido que puede ser factible? ¿Sentimiento o realidad?

-Es una de las opciones que está ahí. Ellos no van a dejar de trabajar. Se va a seguir trabajando lo más rápido posible hasta el punto de que han duplicado los trabajadores para avanzar más. La idea es que para Semana Santa podamos estar en nuestro templo.

-¿Se lo han dicho desde la misma constructora?

Sí, la misma empresa constructora, desde las distintas autoridades que han pasado por aquí, nos han dicho que sí pueden ayudar, que están a nuestra disposición para intentar terminar lo más rápido posible porque al final la iglesia, el retablo puede sufrir si no se cierra. El retablo es madera y puede llegar a sufrir. Hay que hacerlo lo más rápido posible.

-En este sentido, ¿se plantea poner una lona en la cubierta?

-No es viable. Se hizo en otras ciudades donde ha pasado el mismo problema por un desprendimiento de las cúpulas y al final fue peor ponerla. Se ha valorado y se ha decidido que mejor no. Puede venir una racha fuerte de viento y se lo lleva todo y al final puede causar más daños que los que había.

-La idea es empezar la obra de reconstrucción cuanto antes pero, ¿se tendrá que andamiar la iglesia por fuera y por dentro?

-Sí, van a andamiar por fuera y por dentro para tener toda la zona de la cúpula completamente segura: Y empezarán a trabajar y poco a poco iremos viendo cómo vuelven a levantar la cúpula desde la calle Platerías.

-No obstante, ¿por qué no andamiaron por dentro antes del desplome?

-No estaba previsto. Se hizo una cata y simplemente se vio cómo estaba. Entonces antes de acatar esa obra se decidió cerrar la iglesia y realmente no ha dado tiempo a nada porque según se ha abierto para ver cómo estaba la situación se ha hundido. Entonces no ha dado tiempo. La idea era trabajar desde dentro y desde fuera con la máxima seguridad, pero es que no ha dado tiempo. En el momento que han abierto más la cúpula, aparte de la cata, es cuando ha sucedido el derrumbe.

-Hablando de la cúpula, ¿se plantean reproducir tal cual la cúpula histórica o levantar una cúpula similar con algún detalle que recuerde que esto sucedió…?

-La idea es intentar hacerlo lo más parecido posible pero ahora mismo va a ser imposible. No tenemos todavía ningún proyecto, aunque ya se está trabajando en ello. Cuando los tengamos saldrán a la luz porque, además, hay que tener en cuenta los peritos del Ayuntamiento por cuestiones de estética. Aún no está decidido.

-¿Quizás algún detalle que indique desde la calle que la original se cayó un 25 de junio de 2024?

-Precisamente queremos mantener la bola con la veleta. Está muy dañada, vamos a intentar recuperarla para volver a ponerla porque era uno de los símbolos de la cúpula. Queremos que esté arriba del todo independientemente de cómo sea la cúpula.

-¿Supongo que dando gracias a la Virgen de los Dolores porque se desplomó 48 horas después de cerrar por completo la iglesia?

-Sí. Se cerró por seguridad porque no sabíamos lo que nos íbamos a encontrar. Entonces decidimos cerrar por si acaso y creo que es la mejor decisión que ha tomado la cofradía en muchos años cerrar el templo al culto y que sólo estuvieran los trabajadores. Dando gracias a la Virgen y a todas las imágenes de la cofradía porque nos han ayudado todas un poquito.

-Hablando del patrimonio, el proceso de embalaje de la mayoría de las tallas comenzó el pasado viernes. ¿Y a partir de ahora?

-Las imágenes se han embalado y llevado a la Catedral. Se hará una limpieza exhaustiva, se valorarán las tallas, aunque a primera vista los técnicos dicen que no tienen ningún daño. Se limpiarán y se llevarán a la Iglesia de San Miguel para tenerlas allí al culto y para las personas que quieran puedan ir a ver a la Virgen de la Vera Cruz que presidirá el altar mayor. Además, todos los cultos que tenga la cofradía se harán en esa parroquia. Todas las imágenes estarán allí, excepto las que vayan a la Catedral, como el paso de El Descendimiento.

-¿Y la tan querida borriquilla?

La borriquilla quedará custodiada en la Casa de Hermandad de la cofradía. Los técnicos de Las Edades del Hombre nos harán la limpieza de las imágenes y la guardaremos aquí.

-¿Supongo que llegado el momento o la necesidad pedirán colaboración para ayudar a volver entre todos?

-Pediremos colaboración incluso a todas las instituciones porque al final esto no es solamente de los cofrades. Creo que es una iglesia que es patrimonio de Valladolid. La dirigimos los cofrades, la disfrutamos los cofrades, pero es un templo que tiene muchísimas visitas de gente de fuera. Verdaderamente es algo importante para Valladolid y nos gustaría que desde todos los sitios se pudiera levantar esto porque es un bien para todos: tanto la gente de la calle e instituciones como cofrades.

-Y volver a salir por la calle de la Platería…

-Es lo primero que estamos deseando, que la Madre de la Vera Cruz vuelva a salir por Platerías como lo ha hecho toda la vida.