Valladolid

Una escuela para 400 alumnos ocupará el primer edificio del centenario cuartel de Farnesio

Con la correspondiente licencia de obras ya autorizada por parte de la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento, la dirección de la Escuela Superior de Diseño (ESI) confía en iniciar los trabajos de acondicionamiento y ampliación de las hoy maltrechas edificaciones del Conde Ansúrez, que pasarán a denominarse 'Campus ESI', en un plazo de un mes.

«Es un proyecto muy importante para la ciudad; tenemos las cosas claras, llevamos mucho tiempo trabajando en ello», remarca su directora, Susana Hernández, al tiempo que concreta que las actuaciones han de completarse en un periodo de entre diez y doce meses. La propia ESI, que en la actualidad mantiene sus aulas justo enfrente, al otro lado del paseo del Arco de Ladrillo -del lado de la Ciudad de la Comunicación-, correrá con la inversión, de 2,5 millones de euros, aunque contará con el apoyo de Sodical, Iberaval y Caja Zamora.

Los bloques del Conde Ansúrez, sede histórica del no menos histórico Regimiento Farnesio, sobre los que se erigirá el nuevo centro de formación, tendrán que ser sometidos a una importante rehabilitación, aunque con un meticuloso lavado de cara, ya que los bloques militares se deberán conservar en su totalidad al estar protegidos. De hecho, aún a día de hoy, casi cinco lustros después de que los últimos militares abandonaran las instalaciones, el acuartelamiento conserva parte de su memoria, con la torre para vigilar el perímetro como principal evidencia de lo que en su día fue esa zona.

Aunque gracias a esta catalogación de protegida también se deduce cuál era la finalidad y quiénes utilizaban esos antiguos talleres, que desde el curso 2025-2026 acogerán a hasta 400 estudiantes: '2º Escalón de Mantenimiento. Ajuste. Electricidad. Chapistería. Soldadura. Pintura', puede leerse junto a los accesos -en su día portones, hoy enormes huecos que desvelan su interior, aunque el paso está prohibido- de una de las edificaciones, que aún mantiene el letrero de 'Taller'.

La futura sede de la Escuela Superior de Diseño, que implicará la cesión de uso público de soportal privado de 45,57 metros cuadrados en un picón del terreno, permitirá ampliar y reforzar la oferta educativa de un centro que ya suma treinta años de trayectoria. Esta 'bifurcación' en cuanto a los espacios traerá consigo asimismo una reorganización en las formaciones. La idea que maneja la dirección es trasladar a la zona nueva los estudios de Diseño Gráfico, Diseño de Moda y Diseño de Interiores, además de los títulos internacionales HND y másteres en diseño que se vienen impartiendo en un espacio que cuenta con 200 alumnos.

Se quedarán, por tanto, en Arco de Ladrillo, 71, la Formación Profesional de Edificación y Obras y otras especialidades aún por determinar. «Toda ampliación trae consigo más capacidad para todo; de alumnos, que podremos acoger hasta 400; de profesorado, aún por concretar (son más de ochenta trabajadores a día de hoy) y de estudios, que no lo hemos decidido todavía pero la idea es incorporar nuevas líneas de formación», explica Hernández, quien no obstante anticipa que están «metidos de lleno en todo lo relacionado con la ciberseguridad y la Inteligencia Artificial».

Una de las «principales razones» que motivan esta ampliación -reconoce su directora- es la «buena acogida» que tiene la ESI. Cada curso recibe «mayor número alumnos» empujados, entre otros aspectos, por el «elevado nivel» de inserción laboral que tienen sus formaciones. «La tasa de inserción y emprendimiento es muy alta; desde que se creó la escuela podemos decir que se han puesto en marcha más de doscientas empresas por parte de alumnos de la ESI», subraya Susana Hernández, que también insiste en que «hay que conseguir como sea que los jóvenes se queden en la ciudad, que encuentren aquí oportunidades, un proyecto empresarial y que tengan ilusión».

El centenario cuartel de Farnesio, que hasta ahora solo tenía confirmada la remodelación de algunos de sus barracones centrales para albergar 68 viviendas protegidas, ya tiene prácticamente completado su entramado urbanístico, con las calles ya asfaltadas, la superficie urbanizada y la señalización instalada. Está aún perimetrado, eso sí, con vallas de obra provisionales que impiden el acceso al nudo del acuartelamiento. Será por una de esas calles recientemente inauguradas, Bartolomé de las Casas, perpendicular a Arco de Ladrillo y que une Farnesio con General Shelly -sobre los terrenos del otro cuartel, el General Monasterio- con Transición -entre el parque de la Paz y el cuartel Conde Ansúrez-, por donde se accederá al nuevo 'Campus ESI', cuyas instalaciones contarán con una plazoleta peatonal adoquinada que cuenta ya con arbolado y bancos.

Esta primera llegada a la superficie del antiguo acuartelamiento de Conde Ansúrez impulsará -señalan fuentes del Ayuntamiento- su transformación «en un nuevo pulmón verde para la ciudad». «Tanto la ESI como las futuras licencias que expida el Consistorio llenarán de nuevos contenidos y servicios estos antiguos terrenos, que se convertirán de manera progresiva en una nueva apuesta de expansión de la capital», concluyen estas mismas fuentes. A día de hoy, eso sí, aún se desconoce qué dotaciones (públicas o privadas) llenarán el resto de edificaciones catalogadas del centenario espacio, incluido su inmueble principal, más allá del proyecto de reconvertir sus barracones centrales en viviendas.