Los Bomberos de Valladolid han tenido que desplazarse esta tarde hasta la calle Falla después de que un vecino alertase de un fuerte olor a gas en esta vía del barrio del Cuatro de Marzo. La llamada hizo que tres dotaciones, con catorce efectivos, acudieran ... hasta el lugar indicado, donde rápidamente se dieron cuenta de que no se trataba de una falsa alarma.
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En el portal del edificio indicado olía a gas y, al ver la llegada de los Bomberos, rápidamente un vecino indicó que ese olor podía provenir de una estufa catalítica que acaba de encender en su casa. El hombre explicó que la estufa quemaba mal y «fogueaba en la plancha delantera», así que los bomberos se adentraron en el piso con unos medidores que les permitieron descubrir que había gas acumulado en la casa, un 4%, y que la mala combustión de la estufa estaba generando monóxido de carbono, que se estaba acumulando y llegaba a las veinte partes por millón.
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Cuando las pruebas desvelaron el origen del escape, los bomberos se encargaron de ventilar la vivienda, sin necesidad de evacuar el edificio. Una vez ventilada, volvieron a encender la estufa catalítica para determinar si continuaba con problemas de combustión.
La prueba realizada reveló que seguía generando gas y monóxido, por lo que los bomberos instaron al propietario a devolver la estufa, que se encontraba en garantía.
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