Borrar
Consulta la portada del periódico en papel
Juan Antonio Arévalo, secretario regional del PSOE de 1979 a 1983, entre las fotografías de Fernando de los Ríos e Indalecio Prieto. ARCHIVO MUNICIPAL
El hombre que pudo haber sido el primer presidente de Castilla y León

El hombre que pudo haber sido el primer presidente de Castilla y León

Juan Antonio Arévalo, fallecido el pasado 2 de agosto, reconoció su error al renunciar a ser candidato socialista en las elecciones de mayo de 1983

Martes, 9 de agosto 2022, 00:18

Para muchos, incluidos varios compañeros de militancia, de confidencias y aventuras políticas preautonómicas, sigue siendo un misterio la razón por la que Juan Antonio Arévalo Santiago, fallecido el pasado 2 de agosto, renunció a encabezar la candidatura socialista a las primeras elecciones de la recién creada autonomía de Castilla y León. Y es que en aquel momento -mayo de 1983- la figura de Arévalo era indisociable del apasionante y turbulento proceso político que confluiría en la configuración de la comunidad autónoma.

Pocos recuerdan, sin embargo, que él mismo se refirió a aquel sorprendente episodio reconociendo su error, pero aclarando, de paso, las razones que le llevaron a adoptar tamaña decisión. Recapitulemos aquel momento. Juan Antonio Arévalo, nacido en Valladolid el 2 de junio de 1935, era licenciado en Derecho y letrado del Instituto para la Reforma y el Desarrollo Agrario (IRYDA) cuando se inició la etapa preautonómica. Elegido secretario regional del PSOE en noviembre de 1979, pilotó las negociaciones con la Unión de Centro Democrático (UCD), partido ganador en las elecciones generales de aquel año y mayoritario en la región, para avanzar hacia un Estatuto de Autonomía que otorgara carta de naturaleza a Castilla y León.

Arévalo fue, de hecho, vicepresidente y consejero de Justicia en el Consejo General de Castilla y León (primer antecedente de la Junta) y candidato a suceder a su primer presidente, el centrista Juan Manuel Reol Tejada, en julio de 1980. Participó activamente en las negociaciones del texto del Estatuto con UCD, al tiempo que desempeñaba el cargo de senador por Valladolid. En definitiva, Arévalo fue la cabeza visible de la oposición socialista durante el proceso preautonómico que pilotó UCD, formación centrista liderada a escala nacional por Adolfo Suárez, a la que pertenecieron los dos presidentes del Consejo General de Castilla y León, los burgaleses Juan Manuel Reol Tejada y José Manuel García-Verdugo.

Parecía lógico que, a la primera cita electoral de la autonomía, el 8 de mayo de 1983 (el Estatuto se aprobó el 25 de febrero), el PSOE presentara como cabeza de lista a su secretario regional y, a la sazón, principal exponente del partido en el proceso de construcción autonómica. En política, sin embargo, la lógica no es siempre una regla fija. Y así pudo comprobarse en Castilla y León. De hecho, la sorpresa saltó a los medios de comunicación el 13 de febrero de 1983: el día anterior, Juan Antonio Arévalo había presentado su dimisión irrevocable a la secretaría regional del PSOE.

El vallisoletano aducía su labor en pro de la consecución del Estatuto y consideraba, por tanto, que su etapa al frente del socialismo regional había sido colmada. Sin embargo, algunos periódicos como ABC hablaban de disensiones internas en el PSOE y otros apuntaban a las discrepancias, más que evidentes, entre Arévalo y Gregorio Peces Barba, diputado por Valladolid en ese momento. Treinta años después de aquel histórico suceso, el mismo Arévalo me confesaba las razones de aquella determinación:

«No es cierto que yo pensara que podía perder las elecciones, en absoluto; es más, yo estaba seguro de que el PSOE las iba a ganar, pues el ambiente a escala nacional era inmejorable [Felipe González había arrasado en las elecciones generales de octubre de 1982] y el partido gozaba de simpatías en Castilla y León. Lo que ocurre es que yo tenía pensado desde hace tiempo que mi futuro político no pasaba ya por las elecciones regionales, tampoco por las municipales, y eso que me habían ofrecido liderar la lista por Valladolid. Quizás sí me hubiera decantado por la política nacional, aunque la verdad es que no tenía mucho afán; nunca me he considerado un político profesional».

Imagen principal - El hombre que pudo haber sido el primer presidente de Castilla y León
Imagen secundaria 1 - El hombre que pudo haber sido el primer presidente de Castilla y León
Imagen secundaria 2 - El hombre que pudo haber sido el primer presidente de Castilla y León

Lo cierto es que él mismo reconoció su error: «No obré bien, no calculé muy bien lo que estaba a mi alcance; con el paso del tiempo me he arrepentido de haber presentado la dimisión aquel día». Para solventar la situación creada por su dimisión se reunió, en primer lugar, la Ejecutiva del PSOE, en la que Arévalo presentó a José Constantino Nalda para sucederle en el cargo. Sin embargo, la mayoría de sus miembros optó por el zamorano de Villaralbo Demetrio Madrid López, diputado nacional desde 1977 que, además de su destacada labor en la etapa preautonómica, había llevado a cabo una relevante intervención en defensa de la aprobación del Estatuto de Autonomía de Castilla y León en el debate de la Ponencia Constitucional celebrado los días 20 y 26 de enero de 1983.

Lo más curioso es que quienes apostaban por Demetrio Madrid lo hacían sin su consentimiento; de hecho, aquel ni siquiera asistió al Comité Regional del partido que, días después, tras una larguísima jornada, terminaría eligiéndolo para el cargo por un estrecho margen de votos frente a Nalda. «Tuvo que ser la secretaria de organización, Carmen García Bloise, quien, tras una extensa reunión celebrada en Valladolid, terminara convenciéndome para que aceptara la secretaría regional del PSOE», ha escrito el mismo Demetrio Madrid, vencedor en las elecciones autonómicas de mayo de 1983 y primer presidente, gracias en parte a aquella decisión de Juan Antonio Arévalo, de la Junta de Castilla y León.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla El hombre que pudo haber sido el primer presidente de Castilla y León