Cubillas de Santa Marta, corazón de la vanguardia castellana

Aquella reunión de pintores, poetas y escritores se celebró el 8 de septiembre, domingo, y tuvo como anfitriones al poeta Pablo Montenegro Duque (que mucho más adelante sería alcalde de Cubillas) y a Modesta Asensio-Allenet, una mujer nacida en el pueblo pero residente en Paris, donde llegaría a presidir la Unión de Mujeres Pintoras y Escultoras y cuya trayectoria, injustamente desconocida en nuestra provincia, se merece por sí sola un amplio reportaje. A ambos los acompañaba otra artista francesa de vanguardia, Marie-Thérèse Vacossin, que ya era conocida en Valladolid por haber expuesto, tres años antes, en el Palacio de Santa Cruz junto a Asensio-Allenet.

Ambas artistas pertenecían entonces a un conocido grupo francés de vanguardia denominado «Expresiones Actuales» («Expressions Actuelles»), formado también por Raymond Préaux, Marcel Mazard y Pierre Renard. Enamoradas de las tierras castellanas, eligieron Cubillas por ser el pueblo natal de Modesta, pero también por la estrecha relación de esta con el poeta Montenegro y por la implicación tanto de las autoridades del pueblo como de una parte muy relevante de la bohemia artística y cultural de Valladolid. De hecho, la exposición de Cubillas no se ceñía únicamente a pinturas y fotografías de vanguardia, sino que ofrecía un producto muy singular.

Se trataba de un manuscrito sobre Castilla, sus pueblos y sus gentes, que llevaba por título «Cuevanunca o el borrón de un zurdo». Compuesto por poemas de Montenegro y fotografías «de una Castilla desaparecida» representada por Dueñas, Ampudia, Cubillas, Valoria la Buena y Trigueros del Valle, había sido editado artesanalmente (solamente sacaron quince ejemplares) y exhibido en la televisión francesa, en galerías de arte de Paris y Estocolmo y en Televisión Española, concretamente en el programa «Kilómetro Cero», en septiembre de 1962.

La muestra de Cubillas de septiembre de 1963 se convirtió, por tanto, en el epicentro del arte de vanguardia, pero también en la reivindicación cultural de la tradición castellana. «Cubillas de Santa Marta, tierra de buenas bodegas, presume de exposición en estos días, de exposición de cuadros y esculturas. De extraordinarias obras de arte moderno, lienzos y otras composiciones», señalaba este periódico. Junto a Montenegro y las dos artistas procedentes de Paris participaron aquel día «los pioneros del arte castellano», algunos de los cuales integrarían luego el llamado Grupo Simancas: Gabino Gaona, Félix Cuadrado Lomas, Francisco Sabadell, Onésimo Iglesias, Justo Alejo, Jesús Meneses, Ramón Torío, Raimundo de Blas y Antonio Lafuente. De hecho, además de presentar el manuscrito y las obras expuestas, Justo Alejo leyó versos de Pablo Montenegro, calificado como «el juglar de Cubillas», y Raimundo de Blas recitó poemas suyos.

Asensio Allenet y Vacossin regresarían al año siguiente a Valladolid para exponer en la sala 'Castilla' y exhibir «Cuevanunca» en la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Salamanca. La primera no perdió nunca el contacto con su pueblo, al que volvía todos los veranos y donde en 1982 depositó una serie de dibujos y acuarelas realizados por alumnos de la Escuela de Publicidad de Paris sobre el Mundial de Fútbol de 1982. Cubillas de Santa Marta seguía siendo un lugar de reunión de figuras relevantes de la vida cultural, pues además de los Montenegro Duque, en el pueblo residían los actores Emilio Laguna y Germán Cobos, el pintor zamorano José María Castilviejo y el torero Roberto Domínguez. Y en 1979 había recibido la visita de la cantante Betty Misiego.