Dos internos de 17 años especialmente conflictivos y violentos, ambos de nacionalidad española, fueron los instigadores de la multitudinaria agresión a educadores y personal de ... vigilancia en la que participaron el sábado pasado una docena de menores en el patio del Zambrana. En concreto, indicaron fuentes de la investigación, el que provocó el rifirafe «es muy problemático desde pequeño» y tiene otros dos hermanos en el centro. El segundo en secundarle está a punto de cumplir los 18 años. «Ambos son muy agresivos, pero no pertenecen a ninguna banda», han aclarado las mismas fuentes. Al parecer, el resto de participantes en el conato de motín del pasado sábado 21 de octubre proceden de otras provincias.
Los seis trabajadores lesionados en la rápida algarada de los internos del pasado sábado en el Centro Regional de Reforma Zambrana ya han comenzado a interponer denuncias, según confirman desde la Policía Nacional, mientras que la Fiscalía de Menores, que se ha hecho cargo de la investigación de lo ocurrido, está a expensas de recibir un informe de la dirección del establecimiento para completar las diligencias.
Impunidad
Fuentes jurídicas consultadas indicaron que «un elemento distorsionador» a la hora de tipificar estos hechos es que los vigilantes de seguridad no tienen la categoría de autoridad, como ocurre con las policías y la Guardia Civil, a no ser que el incidente se produzca cuando este personal de seguridad privada esté apoyando a las fuerzas y cuerpos de seguridad en sus operaciones y entonces sí se extendería a ellos el tratamiento de autoridad. Al no ser el caso, probablemente la agresión se quede en un delito leve de lesiones y a los autores, como mucho, se les imponga seis meses de libertad vigilada. «De ahí el sentimiento de impunidad que tienen los autores», apostillan las mismas fuentes.
La mecha que encendió la sublevación de los menores fue que uno de los educadores reprendió a uno de estos jóvenes «veteranos» en el transcurso de una actividad por un comportamiento inadecuado y le conminó a marcharse del lugar. El aludido se negó y empezó a tirar piedras y todo tipo de objetos que se encontraba en el suelo al personal de seguridad, actitud que fue replicada por los otros once jóvenes que se encontraban allí. Algunos menores intentaron disuadir a sus compañeros para que pararan, pero fue en vano. Dos educadores y cuatro integrantes del equipo de seguridad del centro resultaron lesionados.
Los trabajadores del Zambrana llevan meses denunciando sIn éxito la «escalada de violencia», que atribuyen a una pérdida de autoridad frente a los menores por el nuevo protocolo impuesto por la dirección desde que falleció uno de ellos mientras era reducido por vigilantes. Este protocolo, critican, aumenta la impunidad de los menores al no castigar sus faltas de manera eficaz, como la anterior medida de restarles dinero de su asignación semanal, lo que denominan el sistema «de fichas». Ello, sumado a un personal insuficiente y al malestar por los despidos de personal laboral programados para noviembre, afirman fuentes del centro, sitúa en desventaja a la plantilla frente a jóvenes cada vez más desafiantes. Una plantilla en la que en los últimos tiempos se suceden las bajas por el síndrome del profesional quemado.
Ucranianos
Los internos mayores veteranos no son los únicos en sumar incidentes de indisciplina y agresiones verbales y físicas contra educadores, técnicos y vigilantes en el Zambrana, ya sea en el área de socialización o en las unidades de reforma y terapéutica. Especialmente conflictivos apuntan fuentes próximas al centro, son los menores ucranianos, algunos de los cuales tienen problemas de salud mental y son «explosivos e incontrolables», pues a su carácter se suma las dificultades de comunicación. De los 85 que llegaron a los centros de protección quedan unos 70, pues el resto ha ido cumpliendo la mayoría de edad. Hay dos de estos menores en reforma porque están cometiendo delitos con medidas cautelares y la Fiscalía le impondrá también medidas a una tercera. Uno de ellos, por la agresión a una profesora.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.