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Detenido por lanzar una botella de Ruavieja a un policía en La FarolaNueva detención para Miguel Ángel G.N., conocido delincuente de Valladolid capital desde los años 80 y que en la noche de este miércoles ha intentado agredir a agentes de la Policía Local al estampar a los pies de estos una botella de orujo de ... la marca Ruavieja en el barrio de La Farola. Además, ha culpado también a los agentes de la muerte de su hermano a los 40 años, ocurrida hace poco más de medio año por causas naturales.
Los hechos tuvieron lugar sobre las 23:50 horas del miércoles, cuando una patrulla de la Policía Local se presentó en la esquina de las calles Esperanto con Luna al ser requeridos al estar un hombre gritando y dando golpes a un coche. Hecho que contrastaron los agentes, que vieron también a Miguel Ángel con la botella de orujo en su mano.
Tras solicitarle la documentación, el arrestado, de 49 años, empezó insultar a los policías a grito de «te voy a apuñalar, te voy a estallar la cabeza contra el suelo, que habéis matado a mi hermano (Alejandro)», mientras hacía ademán de lanzar la botella contra los agentes. Un hecho que finalmente completó, pero que no logró su objetivo al esquivar el agente el impacto.
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Minutos después se completó la detención de Miguel Ángel por un presunto delito de atentado contra la autoridad, para ser trasladado inmediatamente a un centro de salud, donde el conocido infractor se golpeó «voluntariamente» la cabeza contra el portón trasero del vehículo antes de ser atendido.
A pesar de la «autoagresión», Miguel Ángel G.N. empezó a insultar a los sanitarios con improperios como «putas» y «me cago en vuestros muertos» antes de pasar a dependencias de la Policía Nacional.
Esta detención es una más desde que Miguel Ángel saliera de la cárcel a finales del año pasado. De hecho, uno de los primeros arrestos este 2023 sucedió a principios de febrero al quebrantar una orden de alejamiento contra la propietaria del bar Parada, en el barrio de Arturo Eyries, vigente desde hace un poco más de un año.
La orden de alejamiento se dictaminó a finales de enero de 2022, cuando la dueña del local echó a Miguel Ángel por molestar al resto de clientes. Este, navaja en mano de 8,5 centímetros de hoja, «causó daños en el mobiliario de la terraza». Pero no se detuvo ahí y llegó a amenazar de muerte a la trabajadora del local, a la que espetó que iba a volver para «rajarla», cuando ya se encontraba allí una patrulla de la Policía Nacional. Los propios agentes fueron recibidos con un lanzamiento de objetos y las mismas amenazas de muerte –«os voy a rajar y a estallar los ojos cuando os vea sin uniforme»– antes de ser detenido por tres delitos de amenazas graves, daños y atentado a la autoridad.
Pero la historia con este establecimiento hostelero no concluyó en ese momento, pues semanas más tarde, y con la orden de alejamiento vigente sobre la propietaria, el hermano de Miguel Ángel, Alejandro, protagonizó un nuevo episodio cuando fue directamente a por el marido de la víctima de Miguel Ángel. Alejandro, que falleció a principios de octubre de 2022 por causas naturales en su vivienda de Arturo Eyries, le abordó a finales de febrero y le agarró del cuello para golpearle y amenazarle con matarles a él y a su mujer si ella no retiraba la denuncia por el incidente de enero.
En octubre del año pasado, Alejandro fue hallado sin vida en su vivienda de la calle Chile. Un fallecimiento del que ahora Miguel Ángel culpa a a la Policía. «Habéis matado a mi hermano», recriminó en la noche de este miércoles.
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