Detenida una cajera en Valladolid por sustraer la numeración de tarjetas bancarias en su puesto de trabajo para estafar

La Policía Nacional ha detenido a dos mujeres, de 32 y 38 años de edad, y ambas con antecedentes por hechos similares, como presuntas autoras de un delito de estafa con tarjetas bancarias. La investigación se inició a finales de 2018 cuando la Policía Nacional recibió las primeras denuncias de personas que les habían hecho compras con su tarjeta.

Los agentes iniciaron las pesquisas y comprobaron que una de las arrestadas sustraía la numeración de las tarjetas bancarias de las víctimas desde su puesto de trabajo, en la caja de un establecimiento comercial de Valladolid, para después realizar compras a través de Internet en páginas web extranjeras. Posteriormente recibía la mercancía en domicilios de terceras personas.

Las dos mujeres utilizaban documentación falsa y usurpaban identidades de otras personas para realizar las compras a través de internet, daban de alta líneas telefónicas a nombre de terceras personas, también víctimas, a quienes les habían sustraído la documentación, o bien les habían copiado la misma. La mayoría de las víctimas eran personas de edad avanzada.

Una de ellas llevaba más de tres años con tres órdenes de búsqueda y detención en vigor, por diferentes juzgados de España, por usurpación de estado civil, quebrantamiento de condena y ocupación ilegal de inmuebles. Ésta se hacía pasar por otra persona con el fin de ocultar su verdadera identidad, habiendo llegado incluso a matricular a su hijo en el colegio con una identidad falsa para no ser localizada por las autoridades.

Los agentes consiguieron identificar a las presuntas autoras de los hechos, una de las cuales vivía en un piso ocupado. Las detenidas fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia, que decretó su libertad con cargos.

La Policía Nacional advierte a todos los usuarios de tarjetas de crédito que cuando las utilicen para realizar compras nunca las pierdan de vista, ni se las dejen a nadie. La operación ha sido realizada por el Grupo de Investigación Tecnológica, de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valladolid.