Valladolid

El derribo del muro del cuartel Conde Ansúrez anticipa la apertura de su avenida

Desde entonces, los trabajos no han cesado en la zona, pues se habían centrado en completar la urbanización de la avenida principal del barrio de los cuarteles. Esta vía funcionará como arteria de unión entre las dos zonas, partirá desde el paseo de Farnesio y cruzará por General Shelly hasta alcanzar Arca Real, justo en el cruce con Transición. La calle todavía permanece cerrada al tráfico, si bien ya se han colocado en el recorrido varias señales verticales y semáforos que regularán la circulación, así como los futuros aparcamientos. Además, las calzadas ya están asfaltadas y las aceras adoquinadas. Si bien desde el Ayuntamiento no se apunta a una fecha exacta para la apertura a peatones y vehículos, fuentes consultadas sí anticipan que se abrirá al tráfico de manera próxima.

Por el momento, las labores se han centrado en el primer tramo del muro, detrás del centro de personas mayores de Arca Real. Este lunes se ha procedido a la demolición de la tapia, salvando las partes donde el muro funciona como pared de alguna de las estructuras del cuartel. Las edificaciones militares se deberán conservar en su totalidad ya que están protegidas. Por ello, los cuatro barracones acogerán 164 viviendas de protección oficial, mientras que el resto de las estructuras estarán destinadas a usos públicos. Además, el edificio General Monasterio, uno de los cuarteles que permanece en pie, sigue a la venta en el mercado inmobiliario, donde salió por un precio de 2,5 millones de euros.

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Las labores de urbanización también prosiguen en otra de las zonas del entorno, en concreto en los antiguos terrenos del cuartel de Artillería, delimitados por la calle Nelson Mandela, General Shelly, Farnesio y Arco de Ladrillo. Allí ya se ha completado el adoquinado y asfaltado de las vías, así como se han implantado juegos infantiles junto a los solares donde se construyen 675 viviendas.

Además, los vecinos del entorno han recuperado una de las aceras de la calle Arca Real, entre las vías Gerona y Padre Benito Menni. El tramo ha permanecido cerrado a los peatones desde el mes de abril, cuando comenzaron las labores de demolición del edificio de la antigua Seat, donde se está construyendo el nuevo Mercadona y que tiene proyectada su inauguración en el mes de noviembre. La apertura de la acera coincide con la retirada de las vallas que rodean la parcela de 13.000 metros cuadrados y que dejan al descubierto la zona del aparcamiento y la estructura del supermercado, donde trabajarán 48 personas, como avanzaron fuentes de la empresa.