Denuncia un atraco y le encuentran con signos de haber caído de un piso en Pajarillos

El aviso por una «agresión» llegó al filo de la una de la madrugada de este martes y la patrulla que acudió al escenario, en la calle Pelícano de Pajarillos, localizó finalmente a un hombre que presentaba graves lesiones a la altura del número 11 después de peinar el entorno. La víctima tenía cortes en la cara y múltiples fracturas que la impedían caminar. Él mismo relataría inicialmente que dos varones le habían agredido, si bien después ofreció una segunda versión sobre un atraco y una tercera sobre una caída desde un tercer piso. Las heridas que presentaba, y por las que permanece ingresado en el Clínico, sí parecen compatibles, en este sentido, con una caída desde una altura notable, presumiblemente de un piso, según han apuntado fuentes de la investigación.

Los hechos ocurrieron a las 0:45 horas, cuando la sala del 091-092 recibió una llamada en la que el alertante explicaba que se había producido una «agresión» en el citado entorno de Pelícano, una vía perpendicular a las calles Cigüeña y La Salud. La primera patrulla de la Policía Nacional tardó unos minutos en localizar a la víctima, a la que encontraron en la vía pública, a la altura del portal número 11. Él mismo apuntó entonces que le habían golpeado y que los autores eran dos varones, siempre según su testimonio, de origen inmigrante. Los agentes no localizaron a nadie en el entorno. Después apuntaría a que había sufrido un atraco y finalmente señalaría a una caída desde un tercer piso al ser preguntado por las lesiones que presentaba.

La víctima, de 44 años y vecino de otro barrio de la capital (La Rondilla), fue evacuada en ambulancia al Clínico, donde confirmaron que además de los cortes visibles que presentaba en el rostro tenía una cadera y una pierna fracturada. Estas últimas lesiones, a juicio de las fuentes consultadas, apuntarían abiertamente a la versión de una caída desde una «altura considerable». Sea como fuere, el propio lesionado no aportó más detalles sobre las circunstancias de sus heridas y la forma de causarlas de los supuestos agresores.

Fuentes de la investigación confirmaron que la propia víctima es conocida en el ámbito policial y algunos vecinos del entorno apuntaron a que es un «chico que lleva mala vida». Los agentes intentan ahora esclarecer lo ocurrido en plena madrugada y en una calle de Pajarillos en la que a esas horas ya habían cerrado los bares cercanos. «La verdad es que no vimos nada ni escuchamos nada raro», relataron varios inquilinos del bloque del número 11. Allí, a la puerta del inmueble, fue donde localizaron a la víctima los policías nacionales, si bien no tiene allí su residencia.

Los agentes intentan esclarecer si la probable caída en sí fue accidental, voluntaria o provocada; si se produjo un encontronazo previo por motivos aún desconocidos, aunque las fuentes consultadas apuntan a un posible inicidente relacionado con las drogas, o si hubo una agresión previa conforme a la información inicial facilitada por el herido.

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