Diferentes posturas frente al feminismo colisionan en las jornadas de la UEMC de Valladolid

La sesión se ha visto marcada por el enfrentamiento entre las tesis de Maldonado y lo expuesto por Un Tío Blanco Hetero, pues además han sido interpelados por el público en numerosas ocasiones. La periodista ha dado un repaso por muchas de las cuestiones que trata el feminismo, como el aborto, las cuotas, la gestación subrogada y la prostitución, y se ha defendido de los que las «acusan de puritanas» tras alegar que son gente que «no sabe ni dónde está el clítoris», frase que ha levantado algunas ampollas entre los asistentes.

Por su parte, Un Tío Blanco Hetero ha expuesto que «ahora todo el mundo se quiere apuntar al feminismo», con lo que ha hecho referencia explícita al feminismo liberal de Ciudadanos, y con el que ha afirmado «no se puede combatir» las corrientes principales: el llamado feminismo de la igualdad que promulga el PSOE y las instituciones, y el feminismo del generismo y lo 'queer'. Estas dos corrientes tienen su propio choque sobre el género, y para hablar sobre ello el youtuber ha mencionado las jornadas que organizó la Escuela Feminista Rosario de Acuña de Gijón y que tuvieron lugar hace unos días, en las que ha afirmado se vertieron opiniones «anti-porno y anti-sexo».

Esto ha originado un debate en torno a la prostitución, pues Lorena G. Maldonado ha defendido que las feministas no están en contra del sexo, pero que las prostitutas no lo son por placer, pues el perfil de estas es casi siempre el de una «mujer racializada y pobre». El youtuber ha contestado que hay que respetar las decisiones individuales y que una prostituta puede «gestionar ella misma» su sexo sin nadie de por medio, afirmación que Lorena G. Maldonado ha justificado con que «España es un país de puteros», frase que también ha generado protestas entre el público.

La polémica se ha puesto más virulenta en la ronda de preguntas cuando algunos asistentes han cuestionado las tesis de la periodista al afirmar que los hombres también lo tienen difícil. Uno de los contraargumentos fue dirigido hacia la afirmación de Lorena G. Maldonado de que las mujeres tienen trabajos más precarios, a lo que uno de los chicos del público respondió que hay trabajos como la construcción en la que solo hay hombres y que están trabajando a 35º. También se hizo alusión al elevado número de suicidios masculinos en comparación con los femeninos, y a que había problemas más importantes que los que la periodista había mencionando en la mesa redonda. Maldonado ha contestado a estas objeciones con que ella no había dicho lo contrario ni había banalizado los problemas de los hombres, pero que no era el tema del debate.

El tono se ha elevado cuando otra mujer se ha referido a la cuestión del consentimiento y el deseo que la periodista había puesto sobre la mesa con anterioridad. Maldonado había defendido durante la sesión la importancia de hablar más sobre las mujeres como personas que desean y no solo que consienten, a lo que esta asistente ha respondido que nadie se había preguntado si cierta chica (ha parecido que se refería a la víctima de La Manada) había querido pasar una noche con cinco tíos. Otro hombre también ha cuestionado a Maldonado al preguntarla si tiene miedo constante a salir a la calle, porque a él tampoco le gusta pasear y pensar en que un «yonqui» le puede atacar, con lo que ha quitado hierro a la cuestión del acoso callejero.