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Renaturalización urbana y movilidad sostenible en un mismo proyecto. El Ayuntamiento de Valladolid ha sacado a licitación, a través de la Concejalía de Innovación y Empleo, la creación de un corredor verde de ocho kilómetros destinado a la bicicleta, que unirá el estadio de fútbol José Zorrilla, en Parquesol, con el barrio de Los Santos-Pilarica. La intervención, que se enmarca dentro de la estrategia europea Urban GreenUp, iniciativa que busca mejorar la calidad de vida en las ciudades, tiene un plazo de ejecución de cinco meses y conllevará una inversión de 461.158 euros, la mayor parte financiada por la UE. El plazo para presentar las ofertas finaliza el próximo 2 de julio, con lo que, según las previsiones, este trazado podría estar en servicio a principios de 2022.
Los ingenieros de la empresa palentina Zenit han elaborado el diseño de este canal que se jalonará con dos áreas verdes para el descanso y que acabará, ya en el este de la capital, con lo que se denomina como sumidero urbano de carbono. Traducido: un bosque con 1.989 árboles. El corredor aprovechará la infraestructura ciclista existente, tanto la segregada como la red de ciclocarriles del centro, y sumará cinco nuevos tramos para conectar todo el recorrido y que la circulación sea fluida y sin obstáculos. Para ello también se intervendrá en siete cruces del recorrido con el objetivo de que viandantes y ciclistas no entren en conflicto. Así, se delimitarán los espacios de cada tráfico y estas confluencias se habilitarán con un pavimento verde y especies vegetales herbáceas de crecimiento corto y mantenimiento mínimo
Los planos fijan dos hitos naturales en el trazado, uno junto a la pasarela de Las Contiendas, en la calle Padre José Acosta, y el segundo en el entorno del puente de Isabel la Católica. Serán dos plazas estanciales de cien metros cuadrados cada una compuestas por una pérgola de madera para dar soporte a plantas trepadoras, bancos para el descanso, un aparcabicis con tres plazas, fuente de agua potable y un hotel para insectos. Este último elemento es una caseta de madera con tejado a dos aguas y nueve compartimentos para el refugio de diferentes especies.
Además de estas zonas de respiro, el proyecto contempla la instalación de 21 módulos polinizozadores: una composición de cuatro macetas con diferentes especies vegetales que tienen como finalidad atraer aves e insectos que mejoren este proceso natural en la vegetación de la ciudad.
valladolid. El despliegue del programa europeo Urban GreenUp en Valladolid ya cuenta con varios experimentos de renaturalización –demostradores los llama la UE– en marcha. Los dos primeros fueron la colocación de cubiertas vegetales en los mercados de La Marquesina y el Campillo.
A estos , les siguió la instalación del jardín flotante de la céntrica calle Santa María: 21 toldos sobre está vía con plantas en su parte superior. Ahora le toca el turno al corredor verde y a otras dos iniciativas que se plantean también con la intención de reverdecer la ciudad y mejorar la calidad de vida de sus vecinos. Ese es el objetivo de la intervención para instalar una barrera vegetal de ochenta metros de longitud y tres de altura en la mediana del Paseo del Hospital Militar (antigua García Morato), una vía con alta intensidad circulatoria. La mampara, que se colocará en el tramo comprendido entre el Paseo de Zorrilla y el de Arco de Ladrillo, combinará en su composición paneles acústicos recubiertos de madera con varios jardines verticales.
El polígono de Argales será otro de los espacios a mejorar con este programa europeo. Así, está prevista un obra en la zona sur de la avenida El Norte de Castilla, que conllevará la modificación de la sección de la calle mediante la eliminación de la mediana central y la incorporación de franjas verdes con arbolado y bancos. Otra zona en la que se va a intervenir es la rotonda de la calle Pilar Miró, donde se incorporarán dos soluciones verdes: un jardín de lluvia en la isleta central y la plantación de árboles en alcorques-jardín para rebajar la dureza de esta zona industrial.
Uno se colocará en el entorno del Parque de Las Contiendas, cuatro en el sumidero urbano de carbono de Los Santos-Pilarica, otro en la zona de las Cortes de Castilla y León y doce a lo largo del corredor verde. Otras tres unidades se reservan para la zona de huertos municipales del barrio de Parque Alameda, no incluido en el futuro canal.
Cada uno de los módulos dará cobijo a 52 plantas de diferentes especies. En total, los 21 elementos previstos contarán con 1.092. Su elección se llevará a cabo en cada punto dependiendo de las condiciones de luz y humedad. Se podrán ver en zonas muy céntricas, como la plaza de España, Ferrari, Panaderos o la Acera de Recoletos, entre otros puntos. Como complemento a estos minijardines, se instalará un bebedero conformado por un plato cerámico relleno con pequeñas gravas de diferentes tamaños que permitirá que insectos y aves puedan disponer de agua.
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El parque previsto junto al barrio de Los Santos-Pilarica tendrá una superficie de cuatro hectáreas. La memoria elaborada por Zenit Ingeniería plantea una composición con tres zonas forestales diferenciadas y una red de sendas para el paseo. Contará con un espacio educativo sobre el medio ambiente y para la divulgación de recursos naturales, así como una zona recreativa en la que no se descarta también la instalación de espacios para uso deportivo y lúdico.
Todos estos elementos estarán conectados con un despliegue de cartelería en unos pilares de madera en los que se ofrecerá información sobre el programa Urban GreenUp y los beneficios que generan estas intervenciones de renaturalización urbana. En total, se instalarán 16 unidades de diferentes alturas.
PSOE y Toma la Palabra están apostando, desde que accedieron al gobierno municipal, por este tipo de proyectos en coordinación con las políticas medioambientales que está promoviendo Europa. En este caso, se quiere mejorar la conectividad del paisaje entre las áreas verdes del interior de la capital, mitigar los efectos del cambio climático, mejorar de la calidad del aire y la gestión del agua, así como incrementar la sostenibilidad de la ciudad con soluciones basadas en la naturaleza.
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Mikel Labastida y Leticia Aróstegui (diseño)
Óscar Beltrán de Otálora y Gonzalo de las Heras
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