A dos semanas de la inauguración en el Museo Patio Herreriano de Valladolid de la exposición de Cristóbal Gabarrón que conmemora a la vez los 75 años del artista y de las Naciones Unidas (ONU), sigue sumando apoyos el amplio frente crítico de directores de museos y colectivos de artistas ... que consideran una «injerencia política» imponer esta muestra en el calendario del Herreriano, obligando a trastocar su agenda.
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Hasta ahora, no se había escuchado ningún pronunciamiento de la oposición. El concejal del PP, José Antonio de Santiago-Juárez, aseguró ayer que «cuando la edil de Cultura (Ana Redondo) nos trasladó la idea, la valoramos como adecuada y conveniente. Se trata de juntar la relevancia de la ONU, con la que ya había colaborado Gabarrón, con la trayectoria de un artista que siempre se ha sentido de Valladolid».
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De Santiago-Juárez recuerda que el proyecto se gestó tras la propuesta que el propio Cristóbal Gabarrón (que ha pasado casi toda su vida en la ciudad) ofreció al equipo del socialista Óscar Puente. Y que la idea «nos pareció desde el principio que daría prestigio a la ciudad. Pero nunca nos pronunciamos sobre el dónde y el cómo se desarrollaría».
Y ahí se acaba la implicación de los conservadores con este polémico asunto. La decisión del Consistorio de imponer su ubicación en las salas que ocupa ahora la muestra (que todavía puede visitarse) de la artista conceptual Eva Lootz y trastocar el calendario del Herreriano ha levantado una polvareda de críticas de gran número de representantes del arte en España y fuera de ella. Abrió las protestas el manifiesto de la Unión de Artistas Contemporáneos de España, apoyado por más de un centenar de creadores. Y esta semana se ha sumado la Asociación de Directores de Arte Contemporáneo de España.
Algunos no solo cuestionan la intromisión en la libertad de cátedra como programador del director del Herreriano, Javier Hontoria, sino la conveniencia de incluir en un museo contemporáneo como éste a un artista como Cristóbal Gabarrón, con obras para la propia ONU, los Juegos Olímpicos, la Expo de Sevilla, además de aportaciones en el arte urbano de Valladolid, pero sin presencia en colecciones y museos que realcen propuestas de vanguardia.
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«Lo ideal -reflexiona ante estas circunstancias, José Antonio de Santiago-Juárez- es que la muestra se hiciera bien. Que no fuera conflictiva. Lamentamos que no surja desde el consenso. Pero nosotros solo llegamos hasta el momento en que el Ayuntamiento nos informó del acuerdo con el artista».
Desde el Grupo Municipal del PP reconocen su preocupación por la «creciente tensión entre el sector de la cultura respecto al papel del equipo de gestión del Patio Herreriano». Una situación que, a menos de 15 días para la inauguración de la muestra (que también se extenderá hasta la Plaza de San Pablo), «no será bueno ni para Valladolid ni para Gabarrón», sentencia el edil De Santiago-Juárez.
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