Los concesionarios prevén unas ventas el 60% por debajo de 2019

El presidente de Faconauto, Gerardo Pérez, ha avanzado que este año se matricularán en Castilla y León unos 21.600 vehículos, lo que supone una caída del 5% respecto a 2021 y pone de manifiesto la debilidad de un mercado que sigue el 60% por debajo de las cifras de 2019, cuando se vendieron 35.172 vehículos. Esta tendencia se alargará en 2023 con una ligera mejoría, hasta las 24.500 unidades.

El sector sigue muy impactado por la crisis de los microchips, a la que se suma un debilitamiento de la demanda y el incremento de la inflación y los precios de los carburantes, que están provocando que los clientes pospongan la renovación de sus vehículos. La incertidumbre respecto a qué tecnología elegir tampoco ayuda a las ventas.

Con la presencia del presidente nacional, Gerardo Pérez, los profesionales del sector han analizado la triple transición que está viviendo la distribución y reparación de vehículos: digitalización y nuevos canales de venta, transición ecológica y cohesión territorial de la nueva movilidad.

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El directivo ha destacado que Castilla y León es una de las comunidades que mejor ha agotado los fondos del Plan Move y ha pedido a la Junta ayudas para la compra de vehículos de combustión como han implantado otras comunidades. El presidente de Faconauto ha indicado que es esencial salvaguardar la actividad de los concesionarios, que en Castilla y León dan empleo a 4.860 personas de manera directa y facturan 1.380 millones de euros al año.

«Los concesionarios necesitamos seguridad jurídica para que nuestras inversiones no caigan en el vacío y para evitar la destrucción de puntos de venta. Proteger a empresas españolas como los concesionarios es clave para el empleo de miles de familias», ha señalado Gerardo Pérez