Colas de una noche en Ikea

A la hora de la apertura de la tienda había unas 160 personas en cola. A partir de las 05:00 de la mañana fue cuando empezó el goteo constante de clientes deseosos por recibir al menos uno de los cheques de 30 euros. «Yo no suelo venir a estas cosas, pero ayer me había echado siesta y me desperté muy tarde. Pensé que podría aguantar toda noche sin dormir y me vine pensando que habría mucha gente esperando. Mi sorpresa fue cuando el de seguridad me dijo que yo era el primero. El cheque me viene genial. Considero que está bien pagada la hora de espera», dice sonriendo.

No ha estado solo en esta aventura. A las 23:30 horas llegaron los amigos Javier Mínguez y Andrea Fadón, con la madre de ésta, Isabel Fadón. Ellos han conseguido dos cheques de 100 euros y la madre, uno de 30 euros. «Antes que estar en casa sin hacer nada, preferimos venir aquí de acampada a ver si nos llevábamos uno de los cheques. Ha sido una noche entretenida que hemos pasado en buena compañía con Miguel Ángel. Realmente no hemos pasado frío, porque trajimos mantas y almohadas, pero no hemos dormido nada», cuenta Andrea. «Cuando me enteré de la promoción, pensé 'y ¿por qué no?' y aquí me vine. Yo me lo voy a gastar en pilas. Me hacen falta y creo que con 100 euros, tendré para unas cuantas», dice Javier medio en serio, medio en bromas. «También compraremos plantas, bombillas y cargadores. Voy a ir derecho al departamento de electricidad», prosigue.

Hasta las 07:00 de la mañana los cuatro compañeros de cola permanecieron sentados pacientemente a la puerta del centro comercial. A esa hora salieron unos empleados a hacerles entrega de los números que les acreditaban como «los primeros de la fila» para que esperaran «más tranquilamente» hasta la hora de la reapertura de la tienda, prevista para las 10:00 horas. «Nos sacaron un café y unas galletitas. Han sido muy amables», dice el flamante ganador del cheque de más cuantía. «A media noche, llegó también un chico que venía desde León con su suegra, pero al ver que ya éramos cuatro y los cheques más importantes ya no les iban a tocar, decidieron volverse a León. Me ha dado mucha pena por ellos», cuenta Miguel Ángel.

Por fin, después de tan larga espera, a las 10:00 en punto de la mañana se abrieron las puertas de la tienda. En el centro comercial RioShopping había una gran expectación, además de los que hacían cola, se congregó un buen número de curiosos y todos los empleados estaban deseosos de recibir a los primeros clientes. Miguel Ángel tuvo el honor de cortar la cinta inaugural y entonces el confeti empezó a volar y la música del grupo musical Potato Head Jazz Band, arrancó a sonar. Los cien primeros de la cola fueron derechos a la cafetería de Ikea, donde fueron agasajados con un desayuno gratis.

Para Miguel Ángel fue un día lleno de emociones. El cheque no tiene fecha de caducidad y sus compras las hará «otro día, con más calma». Pero a buen seguro, que cuando estrene las fundas nórdicas que tanto desea, se acordará de esta emocionante noche a la intemperie.

El de Arroyo de la Encomienda, el restaurante de Ikea más grande de España

El proyecto de remodelación, en colaboración con RÍO Shopping, ofrece a sus visitantes y clientes espacios renovados y mejor aprovechados. En este caso, entre las principales novedades y mejoras para los visitantes de Ikea destaca su nueva distribución con casi 10.000 m2 de área de exposición de muebles y complementos completamente renovada; una nueva zona de entrada y un nuevo acceso, así como la ampliación de la zona de restauración con hasta 700 plazas, convirtiéndose así en el restaurante Ikea más grande de España.

Al acto oficial de reinauguración de Ikea asistieron a primera hora de la mañana, Alberto Díaz Pico, secretario general de Comercio, Industria y Empleo de Castilla y León; Sarbelio Fernández, alcalde de Arroyo de la Encomienda; Nurettin Acar, CEO de Ikea en España y Vesa Hurttila, director de Ikea Valladolid. El alcalde, Sarbelio Fernández, fue el primero mostrar su agradecimiento en este día tan especial «a sus trabajadores que están a pie de tienda, por su atención y buen hacer en el trato con los miles de visitantes que reciben cada día y a sus responsables en la dirección de la compañía, por saber adaptarse al ritmo de los acontecimientos y adelantarse a las necesidades de sus clientes».

Por su parte, Nurettin Acar, CEO de la compañía, explicó que el proyecto de reapertura ha supuesto una inversión de 8 millones de euros por parte de Ikea para adecuar los espacios de la tienda a nuevos hábitos y necesidades de compra de los vallisoletanos.