El centenario Hotel Roma se reformará por completo tras desvincularse del edificio contiguo

Los técnicos del Consistorio ya tienen en su mesa el plan de rehabilitación y puesta al día de las instalaciones para revisarlo y comprobar que cumple con las prescripciones del Plan General de Ordenación Urbana. El hotel abrió sus puertas en 1909 y la actual propiedad, la familia Lasa, lo compró en 1921, según han confirmado a este periódico, aunque algunas fuentes apuntan que lleva abierto desde 1898. La hemeroteca de El Norte de Castilla recoge multitud de referencias sobre los actos y comidas que se han celebrado en sus salones y en el restaurante durante su larga vida. Nada menos que 113 años (o 124).

El negocio mantiene la actividad interna –el personal está trabajando en los detalles de la reforma–, aunque no admite reservas desde el pasado mes de junio. De esta manera, hasta que el proyecto no reciba el visto bueno municipal y se acometan las obras no recibirá huéspedes.

Los propietarios prefieren esperar a esa autorización antes de aportar detalles sobre cómo será el futuro alojamiento. Hasta ahora, el hotel contaba con un total de 35 habitaciones. También tenía dos grandes salones panelables para reuniones, donde se celebraban eventos de hasta cuarenta participantes, y una sala de juntas para encuentros más reducidos. En el caso de las plazas de aparcamiento, el Roma las ofrecía en el estacionamiento del complejo de Las Francesas, a poco más cien metros de su recepción. Esta configuración se quiere modificar de forma sustancial para mejorar el servicio y el confort de los futuros clientes. Lo que parece seguro es que el Roma mantendrá el aspecto exterior de su reconocible fachada principal de dos plantas.

El primer paso en esta nueva etapa que ahora inicia el Roma ha sido su desvinculación con el edificio contiguo que acogía 19 habitaciones. Los dueños del hotel explican que este inmueble, que durante muchos años ha formado parte del alojamiento, no era necesario para su nuevo proyecto. Así que los propietarios de ese edificio, con tres plantas y ático, han decidido alquilarlo. Un gran cartel anuncia ya la oferta de este bloque de 990 metros cuadrados, que cuenta con un local en planta baja de 215.

Su destino podría ser también turístico, según avanzan fuentes de la inmobiliaria Engel&Völkers, encargada de comercializarlo. Ya se mantienen conversaciones para ubicar un negocio que podría ser hostelero en la planta de calle. El resto de la construcción tiene la calificación de residencial colectivo. Cabría pues desde una residencia de ancianos hasta una de estudiantes, aunque fuentes de la empresa apuntan a que su conversión más viable sería la de apartamentos turísticos por su ubicación en pleno casco histórico. Esta fórmula está ganando mucho espacio en el centro de la ciudad, especialmente en el entorno de la Plaza Mayor y la calle Santiago.

La reforma del Hotel Roma se suma a otras operaciones de calado en el sector turístico de la ciudad en los últimos meses. Entre las más importantes, destaca la compra por parte del Grupo Parrado del Hotel Recoletos, que ya gestiona de manera directa, y del Tryp Sofía de Parquesol, que permanece cerrado.