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Los operarios trabajan en la rehabilitación del edificio principal del Círculo Campestre del Pinar de Antequera. J. Sanz

Valladolid

El centenario Círculo Campestre recupera el lustre y reabrirá antes de fin de año

Los operarios rematan la rehabilitación del histórico club de recreo del Pinar, fundado en 1907 y cerrado en 2015, que incluirá un albergue y espacios para jóvenes

J. Sanz

Valladolid

Sábado, 3 de agosto 2024, 15:01

Los operarios trabajan estos días a destajo para devolver a la vida un espacio histórico de la capital, como es el antiguo Círculo Campestre del Pinar de Antequera, cuyo edificio principal, saqueado y destrozado desde que cerró sus puertas hace nueve años, va poco a ... poco recuperando el lustre perdido de cara a volver a abrir sus puertas como un amplio espacio para actividades de ocio destinadas a los jóvenes antes de «acabar el año», según confirman fuentes municipales. Para ello han sido necesarios cuatro años de trámites administrativos hasta que hace trece meses fue aprobado el proyecto definitivo de rehabilitación con una inversión de 1,5 millones de euros.

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Las obras para recuperar el más que centenario inmueble de comienzos del siglo XX avanzan a buen ritmo y el antiguo club de recreo ha perdido ya las cicatrices del saqueo sufrido desde que cerrará sus puertas definitivamente en 2015. Los obreros, en este sentido, han sustituido ya la cubierta, forrado la fachada exterior, sustituidos sus ventanales y trabajan ahora en la renovación de sus conducciones (agua, luz...) interior para comenzar a vestir el edificio de tres plantas y una superficie útil de 1.290 metros cuadrados. Nada que ver con el aspecto que presentaba hace un lustro, cuando los ladrones robaron ventanas, cables, puertas y cuanto había de valor en su interior para dar paso a una segunda fase de vandalismo que acabó de cubrir cada rincón de grafitis.

La historia

  • 1907 El Círculo Campestre abre sus puertas el 9 de junio de 1907 como club privado de ocio en el Pinar de Antequera.

  • 2012 La falta de socios fuerza su cierre y el espacio para a ser de gestión municipal.

  • 2015 l club, utilizado como piscina municipal y espacio de ocio público, cierra sus puertas.

  • 2024 El espacio reabrirá para el ocio juvenil este año.

La decadencia del inmueble se frenó en 2019, cuando el Ayuntamiento instaló cámaras en el perímetro y llegó a un acuerdo con grupos scout para rehabilitar pequeñas edificaciones de la parcela colindante -allí cuentan con jardines, juegos infantiles, frontón y cancha deportiva-, que pertenecen a las mismas instalaciones de gestión municipal, para su uso en campamentos y talleres. Entonces se valló el perímetro, se instalaron cámaras y se anunció el proyecto para recuperar su espacio principal que ahora está en marcha y que afronta la recta final de la obra.

En torno al edificio noble del Círculo Campestre, inaugurado en el verano de 1907 a los pies de la vía férrea y de la carretera de las Arcas Reales, hay también maquinaria pesada adecentando la más que amplia parcela de dos hectáreas de terreno salpicado de pinos y en la que se ha retirado la piscina -su hueco ha sido cubierto de tierra-, la misma que dio vida al espacio en sus últimos años en uso, ya bajo tutela municipal, después de que el club de recreo cerrará como tal (en 2012) y su gestión pasara a ser pública. Se utilizó como espacio de recreo abierto al barrio solo entre los años 2012 y 2015.

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Sala de cine y cocina

La parcela colindante siempre se mantuvo en uso y ahora le llega al turno al terreno que rodea el edificio noble del Círculo Campestre, que reabrirá sus puertas, si todo va bien, antes de que concluya 2024 bajo la denominación oficial de 'Zona Joven El Pinar'. Sus dependencias acogerán distintos espacios para actividades y, como novedad, un albergue juvenil en su planta superior, que complementará al existente en el Callejón de la Alcoholera. Dicha planta contará para ello con dormitorios, aseos y vestuarios.

En su planta principal habrá un amplio salón acristalado, cocina, aseos, almacén, recepción y un porche. Debajo, en el sótano, se habilitará una sala de cine y las dependencias para las instalaciones de caldera, contadores...

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Todo ello devolverá la vida a un espacio con 117 largos años de historia que en sus orígenes fue epicentro de la vida social de la ciudad, sobre todo, durante el periodo estival. Para su sonada inauguración, que corrió a cargo del alcalde Eduardo Romero el 9 de junio de 1907, se habilitó, incluso, un tren hasta el apeadero.

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