La Catedral confía en recibir dinero estatal en 2022 para ampliar su museo y abrir el Patio de los Cipreses

No solo se trata hacer de este enclave «un museo del siglo XXI con un discurso atractivo para el visitante», según destaca Enrique Martín, de Las Edades, sino que detrás hay también una necesidad «logística»: habilitar la entrada a las instalaciones a través del Patio de los Cipreses para que se pueda acceder a la zona expositiva cuando se celebren cultos en la seo. El Ayuntamiento de Valladolid y la Diócesis llevan ya mucho tiempo valorando esta apertura de la iglesia metropolitana a la ciudad a través de este atractivo recinto con entrada por la plaza de la Universidad y que necesita también de una puesta al día, incluida la consolidación de las ruinas.

Ampliar

Esta segunda fase de intervenciones en la Catedral, tras la restauración de la torre sur con la instalación de un ascensor para su visita, dependerá de la inyección financiera que pudiera conceder el Gobierno. Reconocen en la entidad que gestiona Gonzalo Jiménez que la importante inversión necesaria para sumar un nuevo reclamo patrimonial y turístico al templo habrá que afrontarla «por fases», dependiendo de las disponibilidades presupuestarias de la Diócesis y las Administraciones local y regional, ya que hay que cofinanciar la obra.

Mientras que este gran proyecto depende aún del dinero, el próximo año se abordará la necesaria reforma del ábside la nave del Evangelio, donde descansa el sepulcro del Conde Ansúrez, fundador de la ciudad. Miguel Ángel Villamañán, presidente de la Asociación de Amigos de la Catedral, considera fundamental acometer esta obra en los cuarenta metros cuadrados de este extremo de la iglesia, situado a la izquierda del altar desde la puerta principal. Las humedades por capilaridad están afectando de manera muy perniciosa a un espacio que requiere una rehabilitación urgente para que esos problemas no se extiendan a otras áreas del templo.

La intervención incluye la rehabilitación del sepulcro con la efigie yacente del noble y las pinturas de Michel Coxcie que cuelgan de las paredes. Para una de ellas, 'La Crucifixión', el Gobierno de España reserva una partida de 133.000 en los Presupuestos Generales del Estado de 2022 para su restauración. La de 'San Miguel Arcángel' se financiará a través del convenio que esta asociación firmará con el Arzobispado, la Junta y el Ayuntamiento.

La obra tiene un presupuesto conjunto que ronda los 200.000 euros. Villamañán recalca la importancia de poner en valor todos los recursos de iglesia metropolitana, germen de Valladolid, al tiempo que destaca que la última actuación, la restauración de la torre sur, se ha confirmado como uno de los atractivos turísticos con más tirón de la ciudad. Aquella obra, inaugurada en 2015 y rodeada por la polémica política al anunciarse en plena crisis, es hoy uno de los referentes para los visitantes que acuden a Valladolid y que pueden disfrutar de una impresionante panorámica de la capital a los pies de la escultura del Sagrado Corazón, a 62 metros de altura. Entre el 1 de enero y el 31 de septiembre de este año ha recibido más de 4.500 visitas, según los datos facilitados por la Sociedad Mixta de Turismo.

Villamañán califica el museo como el «bello desconocido», apunta la importancia de dar al Conde Ansúrez un espacio digno y relevante, acorde con la importancia que el noble ha tenido para la ciudad, y suma a ello las posibilidades de la biblioteca del templo como otro espacio que merece la visita al dar cabida a libros y documentos de altísimo valor.