Castilla y León pide al Gobierno que la restauración abra al 50% del aforo en el interior el día 8

La Consejería de Cultura de Cultura y Turismo ha tramitado esta petición a instancias de los representantes de la Confederación Regional de Hostelería y Turismo de Castilla y León, que el martes mantuvieron una reunión con Estrella Torrecilla. Mientras espera la respuesta, la directora general de turismo señaló que la restauración de Castilla y León puede cumplir con la distancia de seguridad sanitaria de dos metros con ese aforo del 50%, que «sería un plus para compensar las pérdidas que los empresarios de hostelería han sufrido« a consecuencia del confinamiento y el cierre de sus negocios por el estado de alarma.

En la misma conferencia de prensa, el consejero de Cultura y Turismo, Javier Ortega, presentó el nuevo sello propio de Turismo de Confianza que pretende «reforzar el destino de Castilla y León como referente turístico de calidad, saludable y sostenible». El logo circular recurre en una imagen muy sencilla al tejado de una casa de la que sale un corazón por la chimenea porque «no hay nada que nos de más seguridad que nuestro hogar en estos momentos», con el nombre 'Turismo de Confianza' en español y en inglés. ('Safe Tourism'). Este sello, que busca reflejar «la idiosincrasia del sector turístico en Castilla y León», viene para quedarse más allá de la superación de la crisis del coronavirus por lo que no hace ninguna referencia a la enfermedad vírica. Precisamente, el consejero tuvo unas palabras de apoyo y solidaridad con los familiares y amigos de los fallecidos por la covid-19, y para los muertos y heridos durante el descarrilamiento de un tren Alvia en la provincia de Zamora el martes.

Podrán solicitar este distintivo hoteles, albergues, campings, alojamientos rurales, restaurantes, agencias de viaje, turismo activo y ecoturismo, guías y oficinas de turismo, y adherirse a él de forma voluntaria y gratuita. Tal y como han señalado ambos su implantación será muy fácil y de forma inmediata. Los establecimientos o profesionales podrán solicitar la distinción 'Turismo de Confianza', siempre que cumplan con el protocolo específico para cada actividad turística, que ha sido aprobado por la Secretaria de Estado de Turismo. El sello se logrará en tres fases: evaluación, certificación y auditoría.

Los empresarios tendrán que firmar una declaración responsable con el compromiso explícito en materia de seguridad y confianza turística, que enviarán a la Consejería de Cultura y Turismo. Además, deben de contar con mecanismos de información a la plantilla en la implantación de las medidas sanitarias y con un protocolo conocido por todos los trabajadores para actuar en el caso de que se observen clientes o empleados con sintomatología compatible con la covid-19, siguiendo en todo caso las directrices para la prevención de riesgos laborales y de las autoridades sanitarias.

Una vez que cumplan los requisitos, la dirección de las empresas turísticas recibirán el logo y el sello en vinilo para que pueda exponerse a la vista de los turistas. Serán los propios viajeros los que confirmen el cumplimiento de los compromisos con las respuestas en una encuesta de evaluación que ha preparado la Dirección General de Turismo. El turista podrá comunicar sus quejas y sugerencias de forma privada o a través de un sistema de código QR, que conectará con una encuesta en la que se preguntará sobre las medidas más importantes de la protección frente a la enfermedad. Por lo tanto, el viajero se convertirá en «validador» del sello.

El posible incumplimiento no tendrá como consecuencia sanciones económicas pero sí su retirada y la prohibición de su uso, después de recibir la visita de un auditor especializado en el reglamento del sello y una vez que confirma las quejas de los turistas. En el caso de que la empresa rectifique los errores podrá volver a mostrar el sello en su establecimiento.

El sello certificará que el establecimiento o actividad turística cumple con las recomendaciones establecidas por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, a través del Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE), para minimizar el riesgo de contagio de la enfermedad. La finalidad de este distintivo es reconocer la labor de aquellos agentes turísticos que, además de cumplir con las obligaciones legales vigentes, adoptan, voluntariamente, políticas destinadas a desarrollar procesos de mejora y buenas prácticas en su modelo de gestión y organización, que contemplen tanto a sus clientes como a sus recursos humanos en materia de protección contra la COVID-19.

Inspirado en el del ICTE, el sello de Castilla y León destaca por su gratuidad, mientras que el lanzado por la Secretaría de Estado de Turismo suponía un determinado desembolso para los empresarios, lo que levantó ampollas en algunas comunidades autónomas como Andalucía, un coste que no fue bien recibido por el sector que está sufriendo un duro golpe. «De ahí la necesidad de crear un sello regional que tuviera el mismo aval», apuntó Javier Ortega.

Los establecimientos turísticos tienen ya disponibles manuales de buenas prácticas, coordinados por el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE), con la colaboración las comunidades autónomas, en el caso de Castilla y León a través de la Dirección General de Turismo, la Federación Española de Municipios y Provincias, los agentes sociales, las asociaciones de cada subsector y la Asociación Española de Servicios de Prevención Laboral, según informó el consejero Javier Ortega.

Hasta la fecha se han editado once manuales dirigidos a agencias de viajes, albergues, alojamientos rurales, balnearios, campings, campos de golf, guías de turismo, hoteles, oficinas de información turística, restaurantes y turismo activo. A todos ellos se sumarán próximamente, otros manuales dirigidos a otros subsectores del sector turístico.

Estos manuales contienen especificaciones de servicio, limpieza y desinfección, mantenimiento y gestión del riesgo y han sido supervisados por el Ministerio de Sanidad.