La 'banda del BMW' mantiene su pulso contra los efectivos de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad en una oleada de robos de vehículos que acaba de sumar su penúltimo capítulo en la madrugada de este miércoles. Un vecino ha localizado a primera hora de la mañana un Seat León, el undécimo que sustraen en las últimas semanas, que los delincuentes habían robado la noche anterior y que arrojaron con el motor en marcha y las ventanillas bajadas al Canal del Duero, a la altura de las instalaciones deportivas de Fuente La Mora.
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Los agentes de la Policía Local, a su llegada, comprobaron que el vehículo figuraba como sustraído desde la noche anterior, cuando su propietario, un vecino de San Pedro Regalado, denunció que había desaparecido de su garaje comunitario en un bloque del barrio. El coche está siendo examinado ahora por los efectivos de la Policía Nacional, que investigan en paralelo si el grupo cometió algún asalto en la provincia (lo habitual cuando roban un coche que luego abandonan en llamas o en el agua) durante la madrugada.
El hallazgo del coche se produjo apenas 24 horas después de que fuera localizado un BMW, que había sido sustraído el 19 de noviembre en Tudela, carbonizado junto al frontón de Arroyo de la Encomienda, localidad en la que unas horas antes un grupo de cuatro encapuchados había reventado a mazazos la luna de una tienda de informática para robar material (portátiles, móviles, patinetes eléctricos...) valorado en varios miles de euros.
La renacida 'banda del BMW', legítima heredera del grupo desarticulado hace dos años en la capital, donde sustrajeron más de sesenta coches, en su mayoría BMW y Seat León, y cometieron decenas de robos en comercios, bares y empresas. Sus integrantes disponían entonces de un dispositivo para abrir en segundos los modelos alemanes y utilizaron precisamente algunos Seat León en sus alunizajes. Y de este último modelo han sido sustraídos ya once vehículos en las últimas semanas. A los que hay que sumar cinco BMW, un Audi y un Seat Ibiza (dieciocho en total).
Muchos de los coches robados, al igual que ocurrió con la primera 'banda del BMW', han sido quemados o arrojados al agua (al Canal del Duero o al Esgueva) por los autores para borrar huellas. Fuentes policiales reconocen que este grupo, cuyo ámbito de actuación se centra entre la capital y los pueblos del entorno, suele cometer «uno o dos robos en negocios» cada vez que sustrae un vehículo. Hasta ahora suman dieciocho coches robados en apenas dos meses. Eso que se sepa...
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