Los ayuntamientos de Valladolid aumentan su deuda el 45% desde la pandemia

El incremento es también anual, concretado en una subida que casi alcanza los 16 millones de euros. A pesar de este aumento provincial, la cifra de ayuntamientos que redujeron su deuda a cero en 2022 creció en cuatro. Brahojos de Medina, Carpio, Pollos y Tordesillas son los municipios que sanearon sus deudas en el último registro. Según se desprende de los datos de la Agencia Tributaria, en la actualidad hay en Valladolid 36 localidades con deuda. Para un total de 225 que recoge el informe, el 84% de los municipios tienen sus cuentas saneadas.

Los términos en esta situación son, en su mayoría, localidades pequeñas de la provincia, pero también aparecen con estos registros algunas como Tordesillas, Simancas, Santovenia de Pisuerga u Olmedo. Mientras, la deuda crece en otras localidades como Fresno el Viejo, Mojados, La Parrilla y en Villalar de los Comuneros. El mayor número de deuda lo registra el Ayuntamiento de Valladolid, que arrastra el grueso del crecimiento anual en toda la provincia. En el último año la deuda crece en la capital en 17 millones, un 11%, y alcanza en la actualidad los 162.175.496 euros. La deuda por habitante en Valladolid -295.639- según el Instituto Nacional de Estadística en 2022- es de 548 euros.

Las causas del crecimiento nacen en noviembre de 2021, cuando el entonces alcalde de la capital, Óscar Puente, presentó el proyecto de presupuestos para 2022, que alcanzaron una cifra récord de 382 millones de euros, 77,3 de ellos destinados a impulsar la recuperación económica tras la pandemia. Las previsiones del Ayuntamiento concretaban que la deuda municipal se situaría en los 180 millones de euros para 2022 y finalmente se han mantenido por debajo del último registro que recoge la Agencia Tributaria. Algunos de los proyectos que se han llevado a cabo durante el último año en la capital y que responden a este presupuesto fueron los dos ascensores públicos de Parquesol o la urbanización de la plaza de la Ciudad de la Comunicación, todavía en desarrollo.

El consistorio de la capital se mantiene como el más endeudado y representa el 97% de la deuda de toda la provincia. Siguen los ayuntamientos de Medina del Campo, con una deuda de 664.000 euros, y el de Laguna de Duero, que alcanza los 646.000 euros. Cabe destacar que durante la última semana de julio, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal publicó un listado con las corporaciones locales que incurrirán en déficit resultante de su gestión en 2023. Entre las nueve entidades locales que cerrarán el año con esta situación, según la previsión de la AIReF, se encontraba el Ayuntamiento de Valladolid.

La crisis sanitaria obligó a suspender en octubre de 2020 las reglas fiscales, con la intención de que los diferentes estados tuvieran la posibilidad de hacer frente a las necesidades derivadas de la irrupción de la covid-19. En el caso de la provincia, desde 2019, y atendiendo a los datos de la Agencia Tributaria, se constata que los consistorios aumentaron en general su gasto. Con ello, se rompió con la tendencia que se traía desde 2010 y donde la deuda viva se había reducido de forma progresiva cada año. Un 57% en diez años.

Desde entonces, la provincia ha vivido un incremento derivado de las sucesivas crisis, que han acompañado los últimos tres años y donde la deuda ha aumentado en la provincia en un 45%. De nuevo, el crecimiento viene propiciado en gran medida por el consistorio de la ciudad. Desde 2019, la mayoría de los municipios vallisoletanos han conseguido reducir su deuda después del revés de la pandemia. Solo aumenta en cinco. Casasola de Arión, Mojados, Laguna de Duero y La Parrilla. También en la capital, donde el incremento de la deuda es del 51% (55 millones) desde 2020. En el resto de municipios las subidas más altas suponen máximos de 83 mil euros.

Desde entonces, y a causa de las sucesivas crisis que han acompañado los últimos tres años, la deuda ha dado un vuelco y ahora ha aumentado en la provincia en un 51%. El crecimiento se traduce también en los municipios y en la capital, donde la deuda ha aumentado el 63% desde 2019. De hecho, en el año previo a la pandemia, el Ayuntamiento de Valladolid mantenía la deuda por debajo de los cien millones, algo que se sostenía desde 2016.

A pesar del incremento anual y el que se ha vivido desde la pandemia, la provincia reduce su deuda durante la última década en un 37%. En 2010, en plena recuperación económica tras la crisis de la Gran Recesión, la deuda viva de la provincia de Valladolid se situaba en 267 millones euros, según los datos de la Agencia Tributaria. La cifra de la capital entonces estaba situada en 222 millones euros, un número también muy por encima del que se registra actualmente.

Durante la primera semana de agosto, el Consejo de Cuentas también publicó información relativa a los ayuntamientos de Castilla y León que habían rendido cuentas correspondientes al ejercicio de 2021. La horquilla oscilaba entre el 81,3% en Segovia y el 92% en Salamanca. Cuatro de las nueve provincias incrementaron sus niveles de rendición en plazo en los consistorios de sus provincias. Una de ellas fue Valladolid, que vivió el incremento más importante de la comunidad al aumentar doce puntos. Aumentó del 60,9% al 72,9%.

El aumento de la deuda viva en Valladolid va en consonancia con el incremento general en España. A nivel nacional, el dato ha aumentado el 1,7% en el último año, con subidas generalizadas en 23 provincias. Los ayuntamientos del resto de territorios (29) consiguieron reducir su deuda viva en el último registro. Los mayores registros por comunidades a nivel nacional fueron en Andalucía, Comunidad de Madrid y en Cataluña. En Castilla y León, el mayor aumentó lo registró la provincia de Palencia, con 16 millones de euros más de deuda, mientras que Valladolid fue la segunda. En la comunidad también tuvieron subidas Salamanca y Soria.