Otro atropello mortal eleva a cinco los peatones fallecidos este año en Valladolid

El último siniestro mortal tuvo lugar a las 21:15 horas del domingo en el primer paso de peatones del paseo de Isabel la Católica situado a la derecha de la salida del puente de Poniente, un cruce regulado por semáforos y que siempre se encuentra en ámbar para los conductores que proceden precisamente del puente y que giran hacia el Paseo de Zorrilla para dar prioridad a los peatones. Y esa maniobra, en principio, fue la que hizo el conductor de un turismo que salió del puente para tomar el paseo de Isabel la Católica en sentido a Zorrilla y que golpeó a una mujer de 73 años que en ese momento atravesaba Isabel la ­Católica.

Algunos testigos apuntaron inicialmente que el vehículo podía venir por el mismo paseo (desde el Puente Mayor), si bien la posterior llamada a la colaboración ciudadana a través de las redes sociales por parte de los policías locales hizo que un «buen número de testigos» se pusieran en contacto con el 092 y aclararan que el coche, tal y como explicó el conductor implicado, salía del puente y giró hacia la derecha en un momento en el que la lluvia arreciaba. El caso es que el semáforo, de ser así, estaría sí o sí en verde para los peatones (disponen de un amplio margen de treinta segundos para atravesar los cuatro carriles del paseo de Isabel la Católica) y en ámbar para el conductor, motivo por el cual podría llegar a ser imputado por un delito de homicidio ­imprudente. El conductor, no obstante, dio negativo en las pruebas de alcohol y drogas y colaboró con los agentes.

La víctima llegó a ser evacuada con vida al Hospital Clínico, donde falleció en la madrugada siguiente. La mujer, A. H. G., de 73 años, vivía al otro lado del puente de Poniente, en la calle Mariano García Abril, en Huerta del Rey. Con su muerte son ya dos las mujeres que han perdido la vida este mes en la capital y cinco los peatones fallecidos en el conjunto del año, todos ellos con edades superiores a los setenta años (dos hombres de 74 y 83 años, dos mujeres de 73 y una tercera de 85).

El primer atropello mortal, ahora conocido, tuvo lugar el 9 de febrero a la altura del número 27 de la calle Estación, un punto anterior al cruce con Panaderos que carece de paso de cebra y en el que fue arrollado por un coche un hombre de 74 años que murió once días después en el hospital –este siniestro no fue recogido en los últimos balances de siniestralidad–. El mes siguiente perdió la vida una mujer 85 años que fue atropellada por una motocicleta en la plaza de San Juan y a finales de junio, en la calle Mieses, murió un viandante de 83 años. Ya en noviembre se han registrado dos atropellos mortales, uno en la avenida de Medina del Campo, junto al puente de Arturo Eyries (el día 12), donde fue atropellada una mujer de 73 años que falleció al día siguiente y otro el domingo (día 25), que le costa la vida a otra mujer de esa edad.

A estos cinco fallecimientos hay que sumar la muerte de tres motoristas en otros tantos siniestros ocurridos dentro del casco urbano (el 11 de enero en la avenida de Zamora, el 12 de septiembre en la ronda interior norte y el 25 de octubre en la avenida de Salamanca), con lo que son ya ocho los fallecidos este año en la ciudad, tres más que en todo el 2017.

«Hay que estudiar cada accidente, pero lo cierto es que estas cifras nos dicen que hay continuar tomando medidas para pacificar el tráfico en nuestra ciudad e incidir con las campañas de concienciación a los ciudadanos en materia de seguridad vial», reconoce el concejal de Seguridad, Luis Vélez, quien anticipa su intención de convocar antes de fin de año la citada mesa de la seguridad vial.