Un aparatoso incendio en una empresa de Aldeamayor genera una humareda visible desde Valladolid

Un aparatoso incendio que ha comenzado a primera hora de la tarde en una empresa de tratamiento de cartón y plásticos situada en la carretera de Las Maricas, en el término municipal de Aldeamayor de San Martín, ha generado una enorme columna de humo negro que a estas horas es aún visible desde la capital, a más de diez kilómetros de distancia. El origen de la humareda se encuentra en la planta de la firma Marepa, donde trabajan ya varias dotaciones de Bomberos de la Diputación de Valladolid sin que, en principio, se hayan registrado heridos.

Las llamas, perfectamente visibles desde el exterior de la empresa, se concentran en una parte de los acopios de material apilado junto a la nave. Se trata de un número muy elevado de palés de cartón, papel y plástico que los Bomberos -llegados desde el propio Aldeamayor de San Martín y Tordesillas- se afanan en mojar para abrir un cortafuegos que impida que el fuego alcance al inmueble. Mientras y con el mismo objetivo, trabajadores de la compañía con transpaletas separan los paquetes que no han ardido al máximo del edificio.

«Se están retirando para que no se extiendan las llamas por radiación al resto del material y estamos concentrados en proteger el entorno de la nave», explican desde el operativo de la Diputación Provincial, todo con el fin de perimetrar el incendio para confinarlo. A esta tarea contribuye la dirección del viento, que aunque aviva las llamas también las orienta en dirección a una tierra de labor y no hacia el edificio. No obstante, las fuentes consultadas anticipan que «será complicado extinguirlas» y lo más probable es que se tarden horas en sofocarlas por completo, al tratarse de un material altamente combustible (papel, cartón, plásticos y maderas).

Ha resultado clave la labor que han desarrollado los operarios de Marepa en los primeros momentos, puesto que al percatarse de lo que ocurría y sin esperar a que llegaran los servicios de extinción se han esforzado por que el fuego no fuera a más con sus propios medios, puesto que «han estado tirando agua con un monitor portátil más la lanza que tienen arriba», según han indicado desde el operativo.

Hasta el lugar se han desplazado también dos patrullas de la Guardia Civil de las localidades vallisoletanas de Zaratán y Cabezón de Pisuerga, así como tres integrantes de Protección Civil de Aldeamayor de San Martín con un vehículo en el que transportan 700 litros de agua, en previsión de que pudiera ser necesaria. Precisamente «intentar gestionar el agua y los recursos» para que las llamas no se extiendan es lo más importante en este momento.

El fuego ha comenzado antes de las cuatro de la tarde en la citada planta de reciclaje de cartón, enclavada en el kilómetro 21 de la carretera Cl-600, entre Aldeamayor y Tudela de Duero, una empresa que sufrió un incendio similar en sus instalaciones hace justo dos años, el 10 de mayo de 2022, cuando las llamas devoraron 850 toneladas de cartón y plásticos apiladas en el exterior de su nave de producción, que sufrió daños de escasa consideración. Entonces se emplearon 17 horas antes de dar por extinguido el fuego.

Los servicios de emergencias trabajan en el lugar del incendio para sofocar el fuego, que de nuevo, al igual que ocurrió en la anterior ocasión, ha generado una densa columna de humo negro visible desde la capital vallisoletana, donde se aprecia hacia el sureste y se atisba sobre los cerros de San Cristóbal y del Águila.

Fuentes del 112 han confirmado que no se ha comunicado que hubiera heridos en la planta de Marepa, perteneciente a FCC Ámbito, donde están interviniendo hasta cuatro dotaciones de Bomberos con la Guardia Civil protegiendo el perímetro exterior de las instalaciones. Se trata del cuarto siniestro de similares características que se produce en los últimos años, puesto que además del mencionado de mayo de 2022 se han registrado al menos otros dos, en octubre de 2021 y en julio de 2014.

Marepa, con más de cincuenta años de actividad, es una firma especializada en la recepción de papel, cartón, plásticos y maderas usadas, que compactan para después venderlas a otras fábricas para su reciclaje. En sus instalaciones trabajan más de una docena de operarios.

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