Antonio Cela posa con el símbolo de las jornadas 'negras' ante el Castillo de Fuensaldaña. el norte

Antonio Cela: «La Caja Negra ofrece un menú degustación de lo criminológico»

El veterano investigador policial organiza un encuentro sobre arte y crimen en Valladolid, que se estrenará el próximo 4 noviembre en el Castillo de Fuensaldaña

M. J. Pascual

Valladolid

Lunes, 3 de octubre 2022, 00:32

«La Caja Negra es el Master Chef de la Criminología», señala Antonio Cela (Zamora, 1965), que acaba de cumplir 35 años en el Cuerpo Nacional de Policía y lo celebra dando los últimos toques a un proyecto que simboliza toda su vida: el amor ... por su profesión, la pasión por la criminología «maridados» con sus gustos personales. Arranca esta iniciativa el 4 de noviembre en el Castillo de Fuensaldaña y pretende ser el embrión de una semana anual dedicada al género negro y lo detectivesco en Valladolid. Confluirán especialistas y aficionados a la criminología desde todas las disciplinas artísticas: la literatura, el cine, la música, el cómic, la pintura, la danza.... Su experiencia como investigador policial desde los años ochenta del pasado siglo, que compatibiliza con la docencia universitaria, le ha servido para diseñar lo que define como «un auténtico menú degustación de lo criminológico».

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-No a todos los policías les gusta lo policiaco, incluso muchos lo aborrecen. ¿Cuándo empezó usted a apasionarse por este género?

-Yo aprendí a ser policía en Barcelona, en el barrio chino. La atmósfera era muy 'negra', para los que amamos la profesión nos servía de modelo de aprendizaje. A mí Barcelona es una ciudad que me encanta, aunque ahora haya perdido ese brillo. Tenía unos clubes de jazz que entonces no había en ningún otro lugar de España... Carlos Ruiz Zafón, que es de mi quinta, sabe retratar la Barcelona que yo quise. Probablemente fue allí donde empezó todo. Me gusta muchísimo el cine, la pintura, el cómic, las series. Soy un friki de lo criminológico.

-A lo largo de su carrera ha investigado delitos relacionados con drogas, delitos violentos, localización de personas desaparecidas, menores y ahora está en la Unidad de Intervención Policial, los antiguos antidisturbios. Además es uno de los cinco fundadores de la Sociedad Internacional de Criminología en Valladolid. Desde su experiencia, ¿qué tiene el crimen que interesa tanto al público?

-Engancha porque muestra el lado oscuro de las personas y de la vida, despierta avidez por saber qué hay detrás, se busca la luz. También es la búsqueda a través de un espacio en el que la tensión y la incertidumbre está pendiente en el ambiente, un permanente estado de tensión con el objetivo de encontrar respuestas a lo que no se conoce.

«Una opinión no acreditada puede hacer un daño irreparable, sobre todo, a las víctimas, a las familias», sostiene a propósito del caso de Esther López

-¿Por qué se decidió a poner en marcha esta especie de semana negra en Valladolid? ¿Con qué se va a encontrar el público?

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-Es un proyecto que acaricio desde hace mucho tiempo porque me gusta muchísimo el cine, la pintura, las artes, hablamos del cómic, las series de televisión y de la música. El mundo criminológico es de los fenómenos sociales más inspiradores de los artistas, desde Caravaggio hasta el pop art, obras maestras de la música como el Requiem de Mozart, por no hablar de la literatura... Creo que en Valladolid había que organizar una semana negra como las tiene Getafe, Gijón o Pamplona. Aquí se une mi vocación, con mi pasión criminológica y mis gustos personales. Es la tormenta perfecta. Así que el público se va a encontrar con un menú degustación de lo criminológico. Se ha buscado lo mejor, lo más diverso, lo más actual y lo más divulgativo para que este menú sea apto para todos los estómagos. La idea es hacerlo digerible y muy degustable. Por eso va a haber cine, exposiciones, artes plásticas, conferencias y mesas redondas con criminólogos, escritores y periodistas en activo, como Manuel Marlasca y los dos directores de las semanas negras más importantes de España, Lorenzo Silva, del Getafe Negro y Susana Rodríguez Lezaun, de Pamplona Negra, entre otros invitados. Se pretende reivindicar un formato que no existe en Valladolid y, con esta iniciativa, poner en el panel cultural algo diferente que hasta ahora no existía y que tiene vocación en el tiempo, En este sentido es de agradecer el respaldo de la Diputación de Valladolid y de la directora del Castillo de Fuensaldaña, Laura Martín Ramos, sin cuya ayuda no habría sido posible. Para quien quiera profundizar más en el programa, la dirección web es www.lacajanegra360.com

-Para misterio por resolver que tiene intrigada a toda España, el caso de Esther López, la vecina de Traspinedo desaparecida en enero pasado y cuyo cuerpo apareció un mes después en la cuneta de la carretera a su pueblo. Imagino que el asunto, de máxima actualidad, saldrá en las mesas redondas.

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-No hay nada de lo que no se pueda hablar, pero pretendo que se haga con rigor. No me gusta hablar de cosas que no conozco de primera mano y hay que dejar a los investigadores que hagan su trabajo. Sobre todo, no hay que especular y este caso está 'sub iudice', pendiente de una resolución judicial. Es muy peligroso y dañino entrar en el terreno de la especulación, sobre todo para las víctimas, en este caso, las familias. Una opinión no acreditada puede hacer un daño irreparable.

-¿Si pudiera traer a algún cineasta de sus preferencias, a quién traería para inaugurar la próxima Caja Negra?

-Pues dudaría entre Martin Scorsese y Tarantino.

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