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La ampliación del puente de Poniente dejará alguna franja abierta al tráficoValladolid afrontará durante el presente año un total de 216 obras en su red viaria en las que se invertirán nada menos que 85,5 millones de euros (19,6 de ellos de la Junta y 3,3 de la CHD). El alcalde de la ... ciudad, Jesús Julio Carnero, ha presentado este viernes el programa Reconstruye 2024, un plan de intervenciones en el espacio público que se ha coordinado con los representantes del comercio y la hostelería con el objetivo de que las afecciones a la actividad de estos sectores sean las mínimas posibles durante la ejecución de los trabajos.
Aunque aún quedan seis meses, sin duda, una de las actuaciones de mayor calado por sus efectos en la circulación será la que se lleve a cabo en el puente de Poniente. La ampliación del tablero de este paso sobre el Pisuerga para que gane un carril más obligará a cortarlo desde octubre durante un año. A pesar de que en el cronograma entregado a la prensa a las doce de la mañana pone que el corte es «total» para coches y peatones y se le preguntó por ello a Carnero, fue a las diez menos cuarto de la noche cuando el concejal de Movilidad aclaraba en un audio remitido a los medios a través de WhatsApp que siempre habrá una franja abierta al tráfico. «Ponemos que afecta a vehículos y peatones de forma total, pero eso no significa que se vaya a impedir su paso de forma absoluta; se trabajará en cada lado de la calzada y se dejará paso de vehículos y peatones por el otro», matizaba. «La afección es total pero alternativamente se irá dando paso», añadía.
Carnero no ha querido aportar más detalles sobre esta intervención a la espera de contar con el proyecto definitivo, que tendrá que salir a licitación de forma inminente. No obstante, su clausura complicará los desplazamientos durante prácticamente todo el 2025. El Ayuntamiento ha rescatado este proyecto, con una inversión prevista de cinco millones de euros, de la época en la que León de la Riva gobernaba la ciudad. Se anunció en 2011 y entonces esa ampliación se iba a financiar en colaboración con la Junta. Pero con los apretones de la crisis del ladrillo la reforma de esta infraestructura básica de acceso al casco histórico se quedó en el cajón.
Ahora, a falta de los planos y el diseño definitivos, se recupera con la idea de ampliar los laterales del tablero en 1,50 metros de ancho a cada lado con la finalidad de que el espacio destinado a los vehículos cuente con un ancho total de 9,30 metros en tres carriles. Según avanzó el regidor en julio del año pasado, la acera para el paso exclusivo de peatones tendrá un ancho de 2,70 metros y la otra, compartida con un carril bici, será de 4,60.
Antes de este hito habrá muchos tajos abiertos. Entre los más inminentes, los cortes previstos a partir de julio en dos arterias del centro de Valladolid: López Gómez y Gamazo. En el primer caso, la vía que conecta las plazas de la Universidad y España estará cerrada ese mes a la circulación para renovar todo su asfaltado, ahora plagado de baches, así como para sanearla en todo su trazado. Carnero ha matizado que esta será una primera obra de conservación para que su deterioro no se agudice, pero no descarta una actuación más profunda a futuro.
En Gamazo, por su parte, la obra será más compleja, ya que habrá que excavar para sustituir toda la red de abastecimiento y saneamiento de agua potable. Según se recoge en el cronograma entregado, esta intervención se prolongará hasta noviembre con cortes totales por tramos, que también afectarán al tránsito peatonal. El Ayuntamiento ya da como alternativas posibles para moverse en coche las calles Muro y Dos de Mayo.
También en el casco histórico está previsto intervenir a partir de junio y durante dos meses en la calle Macías Picavea, que se cortará totalmente a la circulación para remodelar la red de alcantarillado. Esta renovación también se realizará en Angustias a partir de mayo. Otra de las vías del centro donde se acutuará es Torrecilla donde se registrarán cortes parciales entre julio y septiembre para cambiar el alumbrado y realizar labores de embellecimiento y renaturalización de su trazado.
Atentos también los conductores que acceden a la ciudad desde la avenida de Gijón porque durante julio y agosto los carriles en sentido centro se clausurarán totalmente al tráfico para el fresado y asfaltado de la calzada, lo que obligará a desviar toda la circulación de entrada por la calle Eras.
Desde julio y durante dos meses, el túnel de San Isidro, arteria de tráfico que ahora funciona como alternativa ante el cierre del paso inferior de Labradores, también será objeto de una renovación de las vigas metálicas tras el accidente que se registró en 2022, cuando un camión del Ayuntamiento se empotró contra esta estructura derribando uno de los grandes listones de hierro. En este caso, la obra se afrontará con cortes alternativos en las calzadas para dar entradas y salidas hacia y desde la plaza Circular. Ojo también los vecinos de La Rondilla, porque en junio arranca la reurbanización de la calle Mirabel, desde Santa Teresa a San Nicolás.
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En el listado de actuaciones inminentes, también se encuentra la construccción del nuevo carril bici por el interior del parque de Las Moreras. Se iniciará en dos meses -la obra está pendiente de adjudicarse- y se prolongará hasta diciembre. En este caso, no hay afección al tráfico, pero se vedarán tramos de esta gran zona verde mientras se afrontan los trabajos. Este nuevo canal para las dos ruedas borrará el que da servicio en Isabel la Católica y que ha sido uno de los grandes caballos de batalla de los populares, al igual que el ya eliminado en la avenida de Gijón.
Estas son solo una parte de las intervenciones, porque a partir de ya, las zanjas y los operarios tomarán multitud de enclaves para acometer obras. Carnero destacó el «ejercicio de transparencia» que supone abrir un diálogo fluido con los principales afectados por estos tajos a los que, dijo, se les mantendrá puntualmente informados y se recogerán sus sugerencias sobre la ejecución de las mismas para que supongan el menor impacto posible en su día a día. El Ayuntamiento publicará en la página web todas las actuaciones para que comercio y hostelería de las zonas afectadas puedan planificar su campaña de compras y alterar así su actividad lo menos posible. Además de la en la página web (www.valladolid.es ), toda la información se podrá consultar a través de los teléfonos 010 y 983 100105.
El PSOE ha criticado que «la pomposidad del nombre utilizado por Carnero -Reconstruye 2024- evidencia el estilo propagandístico del equipo de gobierno PP-Vox que ha tenido la arrogancia de incluir obras de otras administraciones en el plan de actuaciones de los próximos meses: las de la integración ferroviaria, la red de biomasa de la Junta, y las obras que dependen de la Confederación Hidrográfica del Duero en la calle Canal».
Los socialistas instan al equipo de gobierno a «actuar con más planificación y coordinación para evitar los problemas que se han creado, por ejemplo, en torno al túnel de Casasola y la calle Villabáñez». «Lo que se necesita es menos nombres grandilocuentes, menos humo, menos propaganda y más criterio en el trabajo para causar los menores perjuicios posibles en los vecinos», destaca Luis Vélez. El PSOE pone en evidencia «la incoherencia del gobierno municipal porque la integración ferroviaria corresponde a la Sociedad Valladolid Alta Velocidad y resulta que incluye sus inversiones, que rechazan solo de palabra».
Prepárense los vecinos de Parquesol para una segunda parte del año más que compleja. Solo hay que ver las molestias que durante meses han sufrido los residentes de Villa de Prado. La extensión de la Red de Calor con biomasa que está desplegando la Junta de Castilla y León a través de la empresa Somacyl llenará de zanjas la trama de calles del barrio alto desde ya. El color rojo con el que el Ayuntamiento ha marcado en el listado de obras aquellas que supondrán mayores problemas de tráfico adorna todas las de este programa. Arterias básicas como Adolfo Miaja de la Muela, Ciudad de la Habana, Hernando de Acuña, Eusebio González Suárez, Manuel Silvela o José Garrote Tébar tendrán que abrirse en canal para meter los enormes tubos para llevar el agua caliente a las comunidades con calefacción central que se han sumado o se sumarán a esta malla pública. Solo en este trazado de conducciones para rematar lo hecho en Villa de Prado y afrontar las conexiones de Parquesol la empresa Somacyl invertirá 19,6 millones de euros. Las diferentes obras de este plan conllevarán cortes totales o parciales de las vías, desvíos de líneas de Auvasa que discurren por el barrio y, en algunos casos, clasuras temporales de aceras peatonales.
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