Valladolid

Se amplía el plazo para retirar las terrazas de los aparcamientos

Esto supone una ampliación del plazo de quince días para desmontar los palés de madera ubicados en los aparcamientos con la duda de si en un futuro volverán a utilizar ese espacio, que según los propios hosteleros, sí son rentables. Porque paralelamente, el Ayuntamiento trabaja en dar una respuesta a esos 57 hosteleros implicados y ver si es posible volver a sacar parte de su negocio a la calle. De momento, se ha estudiado pormenorizadamente cada situación, además de fotografiar los elementos exteriores para analizar la posible nueva instalación. «Se ha hecho un trabajo de campo y se ha encargado un estudio para que hagan propuestas. Luego se verá si es posible ampliar alguna acera o peatonalizar una calle... u otras opciones. No será algo inmediato», recalca el concejal de Movilidad, Alberto Gutiérrez Alberca.

Y mientras tanto los hosteleros tendrán que tirar de martillo para empezar a retirar una parte de su negocio al aire libre. Fue un parche durante la pandemia para convertirse en nuevo hábito del consumidor en los últimos años. «Se consume más durante el día y en la calle», apuntan los hosteleros antes de unas obras que seguramente arranquen después de las fiestas navideñas.

Aunque es cierto que estas semanas son las menos concurridas en las terrazas por el tiempo, estos aplaudían esa medida y confían, con cierto pesimismo, en volver en un futuro a tener mesas y sillas en el exterior. «En nuestro caso se duplicaba la capacidad del negocio. Nos han pedido dinero y se ha pagado. Entendemos que aquí hay mucho tráfico, pero nos encantaría seguir pagando y colaborando con el Ayuntamiento. Ojalá nos toque ahora desmontar para montarla en el futuro», detalla Beatriz Benito, del bar Artemisa en la plaza Caño Argales, que reconoce también la necesidad de aparcar en la zona. «Sabemos que fue una medida y que hay mucho tráfico», continúa.

Mismo espacio comparte con María Ramama, de El Vapor de Bardulia. Sus terrazas, delimitadas por un improvisado biombo, se ubican sobre el mismo terreno para tener tres mesas cada negocio. Hasta en alguna ocasión, cuando alguna estaba cerrada por vacaciones, empleaban el espacio de la otra. Viven una historia paralela, aunque María detalla que disponer de mesas y sillas en la calle le supone un aumento del «20%» de la recaudación en fechas con más horas de sol. «La gente se ha acostumbrado a estar en la calle. Hemos pagado bastante por tres mesas. Estimo que sean unos 900 euros al año por tres mesas», lamenta la joven hostelera sobre una fuente de ingresos que ahora mermará. «Tenemos un local pequeñito y nos ayuda mucho tener terraza. Es una faena, pero es lo que toca. Si se puede, lo volveremos a solicitar. También entendemos que la gente quiera aparcar», concluye.

El recorrido de afectados concluye en el bar El Tardón de la calle Ferrocarril. Tamara Alegre, la propietaria, muestra el mismo argumentario que sus compañeras de su profesión para incidir que la terraza ha ganado protagonismo al tener más meses de calor. «Se trabaja desde abril hasta noviembre. Se van a subastar los bares que tengan terraza», añade antes de pensar de una forma comunitaria. «Se han perdido muchas plazas por los aparcabicis, paradas de bus... pero en nuestro caso se paga por ello. Y no cobran poco. En verano es una gran ayuda porque esas mesas se mueven mucho. A mí no creo que me afecte porque la clientela entrará dentro del local», remarca Alegre ante una terraza vacía por el frío.

El Ayuntamiento de Valladolid y la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería adelantaron además que, a lo largo de los próximos meses, se elaborará un plan director de terrazas con el objetivo de aprobar una nueva ordenanza a lo largo del próximo año 2024. El presidente de los hosteleros vallisoletanos se ha mostrado favorable a este trabajo e incluso ha aseverado que «da gusto» mantener conversaciones con el equipo de Gobierno. Jaime Fernández ha matizado que «no se trata de prohibir, ni poner, ni quitar terrazas, sino de ordenarlas, aplicar una ordenanza municipal, tener un diálogo y que vaya todo mejor».

Por el momento, este trabajo en la nueva ordenanza no supondrá consecuencia alguna para los más de 1.150 establecimientos hosteleros que disponen de terraza en la vía pública, cuyos permisos se renovarán de manera automática, aunque, como se ha señalado anteriormente, sí que las habrá para las que se encuentran instaladas en zonas de aparcamiento.