Los agentes comerciales, piezas clave dentro del engranaje de la economía

Un agente comercial es un intermediario entre una empresa que fabrica, importa o presta servicios y otra que demanda ese tipo de producto que se comercializa. «Una de nuestras funciones es crear la demanda de ese producto o servicio para luego realizar la venta del mismo y que los clientes pongan rostro a una empresa, que no sientan que son un número dentro de un programa informático, y que con un solo interlocutor, este cliente pueda realizar solicitudes de precios, informarse sobre los plazos de entrega, pedidos, consultas –tanto administrativas como técnicas– y reclamaciones», explica Gabriel Baciero Gómez, presidente del Colegio Oficial de Agentes Comerciales de Valladolid, Palencia y Segovia (COAC).

El agente comercial tiene capacidad de realizar todo ese tipo de gestiones porque, al igual que tenemos con el cliente un contacto presencial y telemático, «también lo mantenemos con la empresa a la que representamos; no todos los clientes conocen la infraestructura y al personal de sus proveedores y es el agente comercial el que, ante las innumerables situaciones que se presentan en el día a día, sabemos qué departamento lo ha de gestionar y qué persona». Todo ello se traduce en una mejor gestión y eficiencia para las tres partes, ahorro de costes y mayor beneficio.

Un agente comercial está siempre en constante proceso de formación y evolución. Tanto las empresas como los colegios oficiales ponen a disposición de estos profesionales distintos cursos de formación para que «estemos más preparados de cara a afrontar cualquier situación que se plantee. Estos cursos pueden ir desde una formación específica del producto que se comercializa, a formación en tecnología, métodos de venta, etcétera».

La suma de todas estas funciones y formaciones hace del agente comercial «una pieza clave dentro del engranaje de la economía, aunque es el consumidor final el que tiene la clave del éxito o fracaso del producto».

En la actualidad, y ante la situación producida por la Covid-19, los agentes comerciales siguen trabajando y adaptándose a las restricciones y nuevos protocolos de seguridad, intentando que la economía no se pare. Gabriel Baciero recuerda que «son muchos lo que creen que el teletrabajo es el futuro, pero nosotros hemos empezado a teletrabajar desde que el teléfono móvil salió al mercado, y de eso hace ya veinte años, y la experiencia nos dice que es la suma del teletrabajo más el trabajo presencial lo que consigue mejores resultados».

El COAC comienza una nueva etapa. «En estos momentos, estamos reformando nuestra sede y digitalizándola, de tal forma que nuestros colegiados podrán celebrar cualquier tipo de reuniones y dispondrán de equipos electrónicos para dichas reuniones; esperamos poder reabrir la sede en septiembre».

Un Colegio Oficial que proporciona asesoramiento fiscal y jurídico a sus asociados, sin olvidar que mantiene acuerdos con distintas empresas como Repsol, Cepsa, Google, Banco Sabadell, la Asociación de Ferias Españolas (AFE) a nivel nacional y otras empresas locales.

A nivel fiscal, «estar colegiado supone tributar por el Epígrafe 511, deduciendo el 100% del IVA soportado en los gastos necesarios para la obtención de ingresos, adquisición o uso de local, telefónico, energía, vehículo, reparaciones, combustible etc. Todo esto le supone al agente comercial una seguridad fiscal y jurídica, junto con un ahorro importante en los costes que se derivan del desempeño de nuestro trabajo».

COLEGIO OFICIAL DE AGENTES COMERCIALES DE VALLADOLID, PALENCIA Y SEGOVIA

Dirección: C/ Colmenares, 1, 47004 Valladolid.

Teléfono: 983 390 762