Un agente de seguros de Boecillo se enfrenta a seis años de prisión por estafar a cuarenta clientes

Ó. M. era agente exclusivo de la entidad aseguradora Zurich en Boecillo y constituyó la sociedad Cealex Siglo XXI SL, de la que pasó a ser administrador único el 18 de noviembre de 2013. La sociedad actuaba con el nombre comercial Centro Asegurador. Según el escrito de acusación al que ha tenido acceso El Norte de Castilla, el acusado, aprovechando su condición de corredor de seguros y agente comercial y la publicidad que tenía de la aseguradora Zurich, iba captando clientes y ganándose su confianza para tramitar seguros de vehículos, viviendas, locales, seguros de ahorro y «con el ánimo de obtener beneficio económico ajeno, lograba que los clientes le entregaran en mano el dinero en metálico o realizaban una transferencia a su cuenta» en la Caixa. Tras recibir el ingreso, sostiene la Fiscalía, «sacaba la cantidad inmediatamente desde un cajero automático y se quedaba con el dinero sin tramitar los seguros que le encomendaban». Después, cuando los clientes le preguntaban al respecto, «les daba largas y les indicaba que habría algún error y que lo resolvería».

De esta forma, las estafas se sucedieron desde el 1 de agosto de 2012 hasta diciembre de 2015 y afectaron a 44 clientes. Según la Fiscalía, los hechos constituyen un delito continuado de estafa en concurso con un delito continuado de falsedad en documento mercantil y concurre la circunstancia agravante de reincidencia, por el que solicita una pena para el acusado de seis años de prisión y una indemnización que suma más de 285.000 euros.

La estafa multitudinaria del corredor de seguros se descubrió en octubre de 2015 de manera fortuita. La Guardia Civil, durante un control rutinario de tráfico paró a un conductor en Granada. Entregó los papeles a los agentes y se quedó estupefacto cuando le dijeron que conducía sin seguro. El hombre aseguraba que había suscrito la póliza a través de un mediador de seguros de Boecillo y, tanto insistió, que la Benemérita comenzó una investigación que culminó con la detención de Ó. F. M. y permitió esclarecer las 44 estafas. Los perjudicados, además de que sus pólizas eran falsas, se quedaban al descubierto ante posibles percances.