El acusado, minutos antes de su declaración ante el tribunal de la Audiencia. rodrigo jiménez
Valladolid

El acusado de estampar un vaso en la cara de su primo: «No estuve allí»

El fiscal eleva la petición de pena un año más por reincidencia e invalida a los testigos de la defensa por su pacto de silencio a la hora de relatar lo sucedido en una discoteca de La Cistérniga

M. J. Pascual

Valladolid

Martes, 27 de septiembre 2022, 14:41

Ni el acusado estuvo allí, ni nadie le vio, ni nadie recuerda nada, excepto el que recibió el impacto de un vaso de cristal en toda la cara que le rompió la mandíbula. Lo que ocurre en la discoteca se queda en la discoteca. El ... pacto de silencio de los testigos presentados por la defensa, por escaqueo, miedo o amistad hacia Cristian San José ha sido tan clamoroso durante el juicio que el fiscal directamente invalidó sus declaraciones con un «sin comentarios» en su alegato final. El ministerio público, que elevó la petición de pena un año más tras comprobar la reincidencia del acusado (había sido condenado con anterioridad por lesiones y no se había extinguido ese antecedente penal cuando volvió a ser detenido), tildó directamente de «inverosímil» el relato de la amiga que, tras la agresión, había acompañado a la víctima, con la cara ensangrentada y la mandíbula rota por el estallido del vaso, para que le curaran de urgencias. La joven tuvo en el juicio «amnesia parcial» respecto de quién fue el autor de la agresión el día de autos, aunque sí se acordaba de todo lo demás, incluso que había celebrado su cumpleaños ese 19 de enero de 2020 y compartido una tarta que le habían regalado con los parroquianos de la Cister Sunday de La Cistérniga.

Publicidad

El propietario del 'after' declaró no haber visto nada, a pesar de que su cliente «desde hace veinte años», Ó. S. A., ha asegurado ante el tribunal que cuando su primo le estampó el vaso en la cara sin mediar provocación, se dirigió hacia el dueño del establecimiento, «que en ese momento estaba cobrando la entrada» y le pidió que llamara a una ambulancia, lo que no ocurrió. Finalmente, relató la víctima de la agresión, alguien le dio una «toallita» que se puso en la cara para frenar la hemorragia y, acompañado de su amiga, se marcharon en su propio vehículo para que le prestaran asistencia sanitaria, primero en el centro de Salud de La Cistérniga, que estaba cerrado, y después al de Santos PIlarica, donde le dieron varios puntos. Posteriormente tuvo que ser sometido a una cirugía.

Tampoco el tercer testigo fue «de utilidad» para esclarecer los hechos ocurridos en torno a las dos de la tarde del 19 de enero de 2020. El joven, a veces camarero y otras veces 'DJ' en la discoteca, aseguró que estuvo toda la noche con el acusado «de copas» por Valladolid y que, en torno a las cuatro y media de la mañana, «cuando cerraron los bares», se marcharon a «descansar» a casa de una amiga. A preguntas del magistrado presidente, no supo responder sobre donde estaba a las dos de la tarde. A las acusaciones les sorprendió que se acordara tan bien de lo que hizo «un sábado de hace dos años y no de las horas siguientes», aunque el testigo reiteró que no había estado en la discoteca ese fin de semana e insistió en dar coartada a Cristian «aunque la franja temporal de los hechos no coincide», ha apuntado el letrado de la acusación particular.

«Me puso un mensaje en Facebook después en el que decía que yo era una maricona, que no me sé pegar, que me intenté follar a su novia y que me caí al suelo como la mierda que soy», ha declarado la víctima

El encausado, que llegó al juicio desde prisión escoltado por la Guardia Civil y se enfrenta a penas de tres y medio a cuatro años y medio de prisión y una indemnización máxima de 13.580 euros, solo ha respondido a las preguntas de su abogado defensor y ha negado la mayor, que se encontrara en el establecimiento cuando se produjo la agresión. Ha sostenido que estaba con R. «en casa de una amiga suya» y que no tiene ninguna relación con la víctima, de quien afirmó que es «familia lejana de mi madre y tiene problemas mentales, se mete con la gente y estuvo detrás de mi pareja hace tiempo». Y aunque negó estar o utilizar las redes sociales, las acusaciones esgrimieron varios mensajes que consideran totalmente incriminatorios. A uno de ellos hizo referencia el agredido durante su declaración. «Yo subí a Facebook lo que me había pasado y lo conté para que todo el mundo lo supiera. Y él me puso que soy una maricona, que no me sé pegar, que me intenté follar a su novia y que me caí al suelo como la mierda que soy», ha relatado Ó. S.

Publicidad

Otro de los mensajes considerados clave por las acusaciones que probarían que el acusado y su amigo el 'DJ' de la discoteca estaban allí lo subió este a su muro. «Yo estaba con la persona que lo hizo y te lo buscaste tú», colgó en una de sus cuentas. Para el fiscal y la acusación particular, es totalmente creíble el relato de lo ocurrido realizado por la víctima, que Cristian le insultó llamándole «chivato» cuando fue a felicitarle el año en la discoteca, que el acusado le dijo que salieran fuera para hablar y que, mientras lo hacían, sin mediar palabra, le estalló el vaso en la cara.

Por el contrario, el letrado defensor ha solicitado la libre absolución para su cliente por considerar que es su palabra contra la de la víctima y que no se han aportado pruebas concluyentes como las grabaciones de las cámaras de la discoteca y su entorno que pudieran haber servido para probar lo ocurrido. «Es inocente porque nadie ha podido acreditar que estuviera en el lugar de los hechos», ha concluido.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

0,99€ primer mes

Publicidad