Cómo actuar en caso de incendio

El primer paso es intentar extinguirlo antes de que las llamas se expandan, una vez transcurridos tres minutos, conviene no seguir con esa decisión y realizar uno de los dos planes: evacuación o confinamiento.

Salir a un lugar exterior, siempre y cuando no haya llamas, ni humo en el camino -recordar que el segundo puede matar más que las primeras-; está prohibido utilizar el ascensor; coger solamente las llaves de la puerta principal para entregárselas a los bomberos y cerrar todas las puertas que encuentre a su paso. Si hay que atravesar una zona con algo de humo, debe agacharse lo máximo posible y taparse nariz y boca con un paño húmedo. En caso de incendiarse la ropa, lo recomendable es tirarse al suelo y rodar.

El confinamiento se realiza cuando las zonas para salir al exterior están intransitables por la presencia de llamas o de humo excesivo. Consiste en buscar un lugar dentro de la vivienda donde refugiarse y permanecer allí hasta que aparezcan los servicios. Es imprescindible que la habitación esté lo más cerca posible del foco del incendio y sellar la puerta con mantas, camisas, toallas, etc. -humedecidas previamente, mejor- para que no entre el humo. Intentar hacerse ver en el exterior para que los bomberos sean capaces de localizar su posición.

El proceso de evacuación es sencillo en caso de vivir en plantas inferiores al foco del incendio, ya que el humo viaja hacia arriba y las escaleras estarán transitable. El protocolo se complica cuando las llamas se encuentran por debajo: resulta imprescindible, antes de salir, cerrar todas las ventanas de la vivienda y coger las llaves; ir blindando las estancias que se atraviesan con las puertas o 'puertas cortafuegos'; no utilizar el ascensor y prestar las llaves a los bomberos.

Cuando salir de la vivienda resulta imposible debido al humo o a las llamas, hay que tratar de blindar la vivienda y no salir a las escaleras. Se colocan sábanas, mantas o toallas húmedas en la puerta principal para que no penetre el humo y se hace uso de cinta adhesiva para fijarlo. Además, es imprescindible cerrar todas las ventanas de la casa y mojar los cristales si éstos se ven afectados por las llamas, para que no se rompan.