Una abogada vallisoletana, concursante de Masterchef 11

Carlota tiene 25 años y es una abogada vallisoletana que se adentró en el mundo de la cocina gracias a las recetas que le enseñaron su madre y su abuela. La vallisoletana tiene una forma peculiar de vestir y está acostumbrada a que le llamen pija, por lo que no le importa lo que opinen los demás. Es una apasionada del deporte y lo práctica mínimo dos horas al día, aunque su sueño desde pequeña siempre fue ser abogada. Su chef favorito es Martín Berasategui y su plato estrella el ratatouille. Su sueño es abrir su propio 'happy place' en Tarifa, donde combinar la comida sana con el deporte.

La vallisoletana comenzó su andadura en el programa gracias a su plato 'Bacalao de la huerta', un guiso de alcachofas con tomate y por encima bacalao. Consiguió el delantal blanco con los 'sí' de Samantha y Jordi, pero recibió un 'no' de Pepe, por lo que le adjudicaron un brazalete negro que le obligaba a luchar por un punto como concursante mediante otra prueba en los fogones. Carlota superó la prueba y se convirtió en concursante de Masterchef 11 por su plato 'Lasaña extraña': unas capas de patata con un pisto de bacalao desalado y, como toque más castellano-leonés, un huevo frito colocado encima.

Por su parte, Jotha tiene 35 años y es un DJ y organizador de eventos de León, que tiene sus primeros recuerdos en la cocina haciendo ensaladilla con su madre y repostería con su abuela. Su plato estrella son las 'albóndigas al candil de Maruja' y gracias a ellas consiguió hacerse con el delantal blanco. Recibió una valoración afirmativa por parte de todos los jueces, por lo que se convirtió en concursante oficial de esta edición de Masterchef. El leonés comenzó la convivencia protagonizando el primer altercado del programa, en el que se enfrentó a Larraitz por dirigirse a ella como «la vasca» y por despertar de manera brusca a los aspirantes por la mañana.